- Maribel: Nos encantan las raíces de tus obras con estilo mexicano, ¿tienes previsto hacer algo nuevo de este género?
L.C. - La música popular mexicana es fascinante. También la descriptiva y contemporánea. México es música, rotundamente. La variedad de música tradicional, popular, indígena, folclórica y de raíz de México, es inconmensurable. Además, se ha realizado, desarrollado y comunicado en una variedad y forma rítmica espectacular. Hay compases de amalgama de todas las formas posibles. Las comunidades indígenas y sus compositores han proporcionado a México un catálogo de músicas preciosas, rítmicas, pausadas, instrumentales de muy variados estilos, vocales, corales… en fin, como se dice ahora, una pasada. Los compositores de música popular se han ido renovando, como si así hubiese sido diseñado en la historia, y hay una colección de compositores y canciones de muy variados estilos que convierten a México en uno de los países con mayor riqueza musical del mundo. Es uno de los pocos países que pueden competir con España en variedades musicales.
Claro que tengo algunos proyectos de inmersión en otras músicas populares aunque están en estudio.
Maribel: Por cercanía, en la Banda Sinfónica Municipal de Madrid, dejas un magnífico recuerdo en tus intervenciones como Director; muchos amigos que valoran positivamente tu calidad profesional amén de la cercanía como persona. ¿Conoces al nuevo Director Jan Cober?
L.C. - Siempre me he sentido muy a gusto trabajando y dirigiendo a la magnífica Banda Sinfónica Municipal de Madrid. Es una formación bandística espléndida. Sin temor a que se enfaden conmigo las otras muchas y buenísimas bandas profesionales españolas, unas 30, puedo decir que, posiblemente sea la mejor de todas ellas, cuando está en forma.
Además, agradeceré eternamente que cuando me hicieron un homenaje en mi pueblo, Campo de Criptana, la Banda Sinfónica Municipal de Madrid, todos los músicos y su director entonces, Rafal Sanz-Espert, fueron al Teatro Cervantes de mi pueblo y me acompañaron, tocando en un concierto en el que pude dirigirla una vez más y disfrutar de su excelente calidad y compromiso musical.
Soy muy afortunado porque he tenido la suerte de disfrutar, dirigiendo a la BSMM, de momentos verdaderamente espectaculares en los que la fusión, la afinación y el espíritu de colaboración entre instrumentos y grupos, hace difícil distinguir si estamos escuchando una banda o una orquesta porque, sencillamente, es un conjunto instrumental que consigue expresar emociones y extender sonidos de gran belleza, muy compactos y bien distribuidos en cuanto a planos, tamaño e intensidad. Es, sin duda, una de las mejores bandas que existen.
No conozco personalmente a Jan Cober pero sé que es un gran director y también sé que conoce el mundo de la banda perfectamente y así es reconocido en Europa y otras regiones del mundo. Me parece muy adecuado para dirigir esa magnífica banda. Estoy seguro de que podremos disfrutar de una etapa brillante y luminosa de esa banda a la que tanto quiero y admiro.
Es un director experimentado en el mundo bandístico. Hay que saber que Holanda, España y Estados Unidos, son los países del mundo que más y mejores bandas de música tienen. En Holanda, además del certamen de bandas más famoso del mundo, tienen una colección de compositores y directores, esparcidos por diferentes países, que conocen muy bien los difíciles entresijos de las bandas. La técnica y experiencia de este gran director pueden beneficiar a la BSMM ahora. Me consta, además que Jan profesa una gran admiración y tiene una alta valoración de la BSMM porque así lo ha manifestado privado y públicamente. Espero y deseo que juntos, banda y director, disfruten del éxito que merecen y nos den conciertos memorables.
Maribel: Emitimos un programa de radio llamado “Que suenen las bandas”, que se ocupa de las obras regionales de todo nuestro territorio; ¿qué opinión te merecen estas agrupaciones?
L.C. - Las bandas de música son un elemento esencial de cohesión social y diversidad que merecen seguir vivas y en activo, con el apoyo y