Entrevista con
MarÍa Elena Ortegón
Presidenta de la Asociación “Huellas de Pan"
Licenciada en Desarrollo Comunitario y madre de cinco hijos, María Elena Ortegón es la fundadora y presidenta
de la Asociación Civil “Huellas de Pan”, una organización sin fines de lucro que trabaja para brindar seguridad
alimentaria a las personas más vulnerables en la zona urbana de Cancún y generar oportunidades que contribuyan
a su autosustento.
Clase Empresarial: Cuéntanos un poco de tus
inicios ¿Dónde nace la inspiración para la creación
de Huellas de Pan?
María Elena Ortegón: Cancún es el principal polo
turístico de México y muchas familias llegan a este
lugar con el deseo de tener una mejor calidad de vida.
Sin embargo, por ser la actividad turística la principal
fuente de ingresos, está se ve afectada con facilidad
ante las diversas contingencias naturales, políticas,
económicas, nacionales e internacionales, poniendo
en continuo riesgo los empleos y en consecuencia los
ingresos.
Mi familia, como muchas, eventualmente atravesamos
estos períodos críticos y vivimos en carne propia la
angustia de no poder alimentar adecuadamente a
nuestros hijos.
En ese tiempo, formaba parte de un grupo Scout y
también participé como catequista en mi Parroquia;
es aquí donde todos los sábados conviví con niños y
niñas que sin haber desayunado asisten al catecismo
y conocí de su hambre y pobreza.
Es evidente el sufrimiento de la población más
desatendida y tal vez esto no es tan inevitable, no hay
razón para no actuar en beneficio de los demás.
Las crisis eventuales padecidas en carne propia me
hacen tomar la iniciativa de llevar a cabo acciones
que puedan brindar a todas las familia en situación de
vulnerabilidad, ya sea temporal o permanentemente,
la tranquilidad de que al inicio de cada día tendrán un
lugar done podrán recibir alimentos.
Y es así como hace 10 años, surge Huellas de Pan, con
la firme decisión de que bajo ninguna circunstancia,
ningún padre o madre de familia, se vayan a dormir
pensando que comerán sus hijos al día siguiente.
CE: ¿Cuándo supiste que tu misión de vida era
ayudar a los demás?
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ME: Creo firmemente que todas las personas tenemos
un propósito de vida y este es crear, construir, hacer
las cosas con lo mejor de nosotros mismos y ponerlas
al servicio de los demás.
He tenido muchas misiones a lo largo de mi vida,
sin embargo, supe que esta era LA misión cuando,
a pesar de las situaciones adversas, ir al comedor y
recibir a los niños y abuelitos se convirtió en una de
las principales razones por la que me levantaba todas
las mañanas.
CE: ¿Cuáles fueron los principales obstáculos en la
creación de la organización?
ME: Me gustaría poder decir que para crear y sostener
una asociación civil sólo hacen falta ganas pero no es
así.
Los recursos económicos insuficientes sería uno de los
principales obstáculos pero no el único, también es de
considerar que al inicio, no se tiene un conocimiento
que permita definir el problema a atender lo que
lleva a muchas personas a querer abarcar mucho,
desgastarse pronto y obtener pocos resultados; otro
obstáculo es que vivimos en una sociedad que no
tiene la cultura del voluntariado ni de la donación a
organizaciones por desconfianza o desconocimiento
de la labor que se realiza.
CE: ¿Cuáles crees que son los principales factores
que han hecho de Huellas de Pan una labor de
éxito?
ME: Una buena causa, la constancia y la profesiona-
lización. Hoy, hemos aprendido a trabajar con mayor
orden no sólo para crear un esquema de atención
exitoso, sino también para la obtención de fondos y
rendición de cuentas.
Nuestros programas se apartan de las prácticas
asistencialistas y un buen ejemplo es “Alimentación
por la Educación” que consiste en proporcionar