A 50 años de su inauguración Aramco incursionó
en otras ramas como la automotriz, al comprar la
participación en la coreana Ssang Yong.
Aramco también revolucionó el ámbito de la
extracción de crudo en el país al desarrollar POWERS,
(Simulador de yacimientos paralelos de petróleo,
agua, gas y gas). POWERS, modela y predice el
rendimiento de yacimientos, tuvo tanto éxito que
inspiró una gama de software de simulación Saudi
Aramco más potente y preciso.
Al inicio de milenio, también se construyó el Centro de
Investigación y Desarrollo (R&DC) que establece una
red de centros de investigación en todo el mundo,
que en la actualidad sigue trabajando en avances
para aumentar el descubrimiento y la recuperación,
reducir costos, mejorar la seguridad y proteger el
medio ambiente.
Pero dejando de lado estos proyectos paralelos,
cabe destacar que en 2013 logró la producción de
3.4 billones de barriles de petróleo, alcanzando a
gestionar más de cien campos de petróleo y gas en
Arabia Saudita, incluyendo 288.4 trillones de pies
cúbicos estándar de reservas de gas natural.
Saudi Aramco opera el Campo Ghawar, el mayor
campo petrolero terrestre del mundo, y el Campo
Safaniya, el mayor campo petrolero marino del
mundo.
Más tarde, en 2018, la compañía de crudo produjo
un volumen de 13.6 millones de barriles de petróleo
diarios y logró acceso a reservas probadas de 256.900
billones de barriles de petróleo y gas. La agencia
Moody's le concedió una nota de A1 y Fitch, un A+,
que en ambos casos están condicionadas por la
calificación de la deuda soberana de Arabia Saudí.
El golpe más certero que los catapultó aún más con
mayor rentabilidad sucedió en diciembre de 2019,
cuando Saudi Aramco salió a la bolsa de forma exitosa
convirtiéndose en la empresa más valiosa del mundo,
alcanzando un valor 1.9 trillones de dólares.
De hecho, con este movimiento, su oferta pública
inicial es considerada aún como una de las más
exitosas de la historia.
2019 figuró como un año de esplendor para la
compañía de medio oriente pues, según sus propios
comunicados, en abril de ese mismo año, se emitieron
12 billones de dólares en bonos. Su primera emisión
internacional de bonos recibió más de 100 billones
de dólares en órdenes de inversores extranjeros, lo
que bate todos los récords de una emisión de estos
de una entidad de mercado emergente.
Esta información se complementa con que, a lo
largo de los primeros nueve meses del 2019, Aramco
obtuvo ingresos netos de 69 mil millones de dólares.
La compañía árabe cuenta, en la actualidad, con filiales
y subsidiarias en China, Japón, Rusia, los Emiratos
Árabes Unidos, Estados Unidos, Gran Bretaña y otros
países. Así mismo colabora con Lukoil, Royal Dutch
Shell, Total SA, Sinopec, y otros.
Dentro de su plan hacia 2030, se busca poner fin a
la dependencia de Arabia de las exportaciones de
petróleo, mediante las ventas en esta década. Se
espera que los ingresos derivados de sus nuevos
planes de acción impulsarán el fondo de riqueza
soberana de la nación, que ya tiene inversiones en
fondos administrados por Blackstone y SoftBank.
@revistaclaseempresarial • 26