Chubasco en Primavera Nº 10 | Page 11

Éramos Aunque te encante dedicarme evasión y arranques a la mitad del vuelo las miradas que iban a cruzarse con la mía, aunque evites el contacto y la agonía, la posibilidad de tenerme o sufrirme, de quererme o perderme, de anhelarme o desearme, aún en el más fingido desprecio no vas a po- der quitarle al nosotros la posible existencia; idea sublime que a veces te atrapa y te seduce. No te rindas, resiste y lucha, que a mí me encanta pisotear la realidad y admirar las imágenes de lo que éramos y no seremos. Déjame el Éramos y llévate el No seremos porque yo no logro conciliarlos. En mis sueños éramos, en lo tuyos no seremos. Si no lograste verlo, deja te cuento que éramos mezcla perfecta de intención y duda. Éramos lo que siempre quisimos ser, lo que no habíamos podido, éramos a lo que no nos habíamos atrevido, lo irrepetible, lo infalible, éramos la decisión mejor tomada, de la que no pudimos arrepentirnos, éramos el recuerdo más preciado, el beso más ansiado, éramos la caricia dada en el momen- to perfecto, el inmenso mar, la oportunidad que lleva prisa, el último vistazo al pasado y el primer paso hacia un nuevo lugar, éramos la sonrisa sin causa aparente, la locura inexplicable, el silencio de la calma, la com- plicidad envidiable, éramos en mis sueños y ahí continuaremos felices. No puedo evitar pensar en todo lo que éramos y no seremos, y tú debes imaginar todo lo que seríamos y no somos. Es bueno evocar que éramos aunque no fuimos porque cada cual es en el tiempo que más le favorece y seguimos existiendo en donde hay mayor oportunidad de permanecer. Yo prefiero quedarme en donde éramos aunque te dejo ir hacia donde sólo tú eres.