TENDENCIAS
idea es conmoverlos, hacerlos
reír, entretenerlos, poder conectar
desde otro lugar. Es entonces
cuando esta técnica se
vuelve clave para cualquier organización
o profesional, pues,
no se deja de hablar de uno, sino
que se condimentan los valores
de la marca, la propia historia,
las características de un producto,
de un fundador, con las
características de los relatos”,
explica Marianela Lavate, especialista
en nuevas tendencias y
management para emprendedores
y pymes, y co-fundadora de
Hula Digital.
Y agrega: “Los recursos no son
nuevos, pero con creatividad
y autenticidad, pueden ayudar
a bajar las barreras de defensa
del cliente/usario para que nos
preste aunque sea un ratito de
su valiosa atención”.
Entre estos recursos a utilizar
podemos: contar nuestra historia,
de cómo surgimos, qué problemas
tuvimos al hacerlo; por
qué un producto se llama de tal
o cual forma; crear un personaje
relacionado a nuestro rubro.
Otro recurso es hacerlos partes
a nuestros clientes de la propia
narrativa de la marca: que elijan
nombres de productos, que
cuenten sus historias, así se volverán
co-autores y se sentirán
parte de la misma.
CUALQUIERA PUEDE CONTAR
Ante la consulta de si es difícil
crear un storytelling, la especialista
gentileza respondió: Instituto de “Como Turismo del todo, Foto Chaco.
puede llevar algo de práctica y
puede haber mucho de prueba
y error. El storytelling no es un
recurso aislado que se ejecuta
por fuera de otras estrategias
y tácticas de marketing. Es decir,
puede ser complicado si una
empresa no tiene clara su voz de
marca, el tono, su propio valor
diferencial y su posicionamiento,
ya que se sustenta en toda
esa elaboración previa que se
haya hecho. Con esa base sólida,
tenemos los primeros pasos dados.
Luego el desafío es plantear
qué contar y, lo más difícil quizás,
el cómo”.
“Tendremos que ver los recursos
de los que disponemos:
tiempo, tecnológicos, humanos,
etc. Sabemos que en empresas
pequeñas o si se trata de un
emprendimiento de una o pocas
personas esto no abunda. Sin
embargo, muchas veces se corre
con la ventaja de estar realmente
conectados con la marca,
por lo que contar la historia no
será un problema. A partir de
allí, también hay que ver a través
de qué medio o plataforma
se contará la historia, ya que eso
influirá”.
PASO A PASO
Para finalizar Marianela nos dejó
una guía paso a paso que servirá
para guiarnos y crear nuestro
propio storytelling.
1. Registrar disparadores: qué
vamos a contar. Inclusive, pensar
con qué objetivo: no es lo mismo
si nos estamos dando a conocer,
que atravesando un cambio
grande en la marca (como un rebranding),
etc.
2. Pensar puntos clave de introducción,
nudo y desenlace. No es
necesario que este desenlace sea
inmediato. Por ejemplo, en redes
sociales como Instagram, se crea
un hashtag y se van contando partes
de la historia como si fueran
episodios. Esto genera expectativa,
un usuario cautivo, mayor tiempo
de vínculo con la cuenta, comentarios,
likes, etc. (y muuuchos otros
factores que favorecen a los benditos
algoritmos con los que hay que
luchar en esas plataformas)
3. Imaginar personajes: pueden
ser los fundadores de la empresa,
pueden inspirarse en clientes
típicos, para lograr identificación;
puede ser un personaje completamente
ficticio o, simplemente
se puede crear una narrativa por
ejemplo detrás de un producto:
contar por qué lleva x nombre,
cómo se lo ideó, qué representa x
color. Por ejemplo, si vendo telas,
puedo contar el origen de esa fibra,
o cómo cuidarla, pero de manera
entretenida. Lo importante
es ofrecer contenido de valor.
4. Animarse. Escribir es re-escribir.
No hay una fórmula mágica
para que funcione a la perfección
el storytelling. Es como una receta:
están los pasos básicos y ciertos
ingredientes, pero quién la va
a sazonar es quien está desarrollando
el relato. Allí es clave la impronta:
no plagiar y ser genuino.
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