Canfield Jack - Chocolate Caliente Para El Alma Jun. 2016 | Page 141
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La historia 333
Ese fin de semana, hacía un seminario en la Posada
Deerhurst, al norte de Toronto. El viernes a la noche,
un tornado asoló una localidad llamada Barrie, al norte
de donde estábamos, y provocó la muerte de docenas
de personas y causó daños por millones de dólares. El
domingo a la noche, cuando volvía de regreso a casa, al
llegar a Barrie detuve el auto. Bajé a la orilla de la
autopista y miré en derredor. Era un desastre. Todo lo
que se veía eran casas deshechas y autos volcados.
Esa misma noche, Bob Templeton iba por la misma
autopista. Se detuvo para mirar el desastre igual que
yo, sólo que sus pensamientos fueron distintos de los
míos. Bob era vicepresidente de Telemedia
Communications, empresa dueña de una cadena de
emisoras de radio en Ontario y Quebec. Él pensó que
seguramente algo podría hacer por esa gente con las
radios que tenían en la empresa.
A la noche siguiente, yo tenía otro seminario en
Toronto. Bob Templeton y Bob Johnson, otro
vicepresidente de Telemedia, vinieron y se quedaron de
pie al fondo de la sala. Los dos estaban convencidos de
que tenía que haber algo que pudieran hacer por la
gente de Barrie. Después del seminario, fuimos todos a
la oficina de Bob. A esa altura, ya estaba empeñado en