Cambio y Cambio Social: Desarrollo e Impacto en la Sociedad Cambio y Cambio Social Desarrollo e Impacto en la | Page 14

Enrique Fernández de Frutos – Corvus Albus progreso, orden y privilegios de la clase dirigente, y oficio, cultura, autonomía profesional y usurpación por parte de la clase obrera. La diferencia entre estos dos tipos de conflicto o de relaciones es lo que define la autonomía del estado. Con respecto a su estudio en los movimientos sociales, Touraine los define como "organizaciones netamente estructuradas e identificables, que tienen por objetivo explícito agrupar a unos miembros con miras a la defensa o promoción de ciertos objetivos sociales precisos". Se caracterizan por ser eminentemente activos, por su intento de ganar adeptos y de llamar la atención del público y de los grupos de élites. Los medios que emplean los movimientos sociales varían desde la mera publicidad a la presión moral. Touraine distingue tres principios que debe reunir todo movimiento social: • Identidad: a quién representa, qué intereses defiende. El movimiento debe autodefinirse. • Oposición: contra quién actúa o a qué se resiste. Es su razón de ser. Si no se opone a algo o alguien ya no ser a movimiento social sino una institución. • Totalidad: debe actuar en nombre de unos ideales o grandes valores admitidos por todos sus miembros. Por último, el análisis que hace Touraine acerca de los movimientos sociales se incluye dentro de un proyecto mucho mayor y ambicioso. Este consiste en la elaboración de un método de análisis acerca de la acción histórica denominado análisis accionalista. Con este proyecto se propone explicar cómo se crean los valores, por qué aparecen, y de qué modo se impulsa la acción social a través de las colectividades. Por último, Touraine se opone a la visión puramente historicista. Lo esencial, a su modo de entender el cambio y el movimiento social, es distinguir ambas caras: positiva y negativa; defensiva y ofensiva, en las relaciones de clases, sin olvidar que el orden internacional establece el predominio de un único modo de producción. Esto influye en la relación entre el estado y la clase dirigente. Por todo ello, vemos como la historicidad se refiere al funcionamiento social y no al cambio. Si entendemos la sociedad como un sistema de relaciones sociales, hemos de reconocer el carácter exógeno del cambio, y no el endógeno como se afirmaba en el siglo XIX.