BRUJULA CIUDADANA Migración y Seguridad | Page 37

2) P erspectivas locales y federales sobre la inseguridad 35 solución pasa por apoyar las policías munici- pales y estatales. Esto, además de presupuesto, necesita voluntad política de la Federación para presionar a los gobiernos locales. Reducción de la impunidad, el imperativo Para hacer una persecución efectiva de los delitos y dar condiciones para la seguridad es imperativo reducir la impunidad, es decir, la cantidad de actos delictivos que no tienen consecuencias. Actualmente la tasa de impu- nidad del país es de las peores del mundo. Hay un sinnúmero de mediciones que nos dejan claro que en México el castigo por cometer un delito es la excepción, no la regla. Por ejemplo, el homicidio tiene una tasa de impunidad nacional del 85% y hay estados donde alcanza el 99%. Antes del 2000, la procuración de justicia ven- día protección a delincuentes dentro y fuera del gobierno. La función de la Procuraduría de Justica estatal o federal, no era perseguir todos los delitos y lograr que los delincuentes pagaran por sus actos, su función era de repre- sión social y política. También en la procuración de justicia la mayoría de los delitos deben ser perseguidos a nivel estatal y municipal, no a nivel federal, hoy los estados han abdicado la función de procurar justicia a la Federación. Para lograr una procuración de justicia efec- tiva no solo es importante desligar la fiscalía de la política, es decir, tener fiscales autó- nomos que no puedan ser removidos por el Poder Ejecutivo, sino que es necesario repensar el funcionamiento operativo de las fiscalías. Las fiscalías han servido a los intereses de los gobiernos locales y fede- rales, su éxito no está en la persecución efectiva de los delitos, ni en la reducción de la incidencia delictiva, sino en qué tan bien quedaban con los políticos, por lo que su organización funcional no estaba diseñada para la resolución de casos. Hay una gran cantidad de políticas y proce- dimientos que deben cambiar dentro de las fiscalías locales y federales para que estas instituciones funcionen adecuadamente, empezando por los incentivos laborales, y revisando hasta las cargas de trabajo. Además, se tienen que reevaluar las facul- tades y competencias de los fiscales, de la policía judicial, de los peritos, y de los servicios forenses. Se debe elaborar una política de persecución penal adecuada para cada localidad, pues el fenómeno delictivo no es homogéneo en el país. Por ejemplo, los homicidios en una ciudad pueden ser ocasionados por una guerra entre bandas por territorio, mientras que en otra pueden ser ocasionados por un rito de iniciación a una pandilla, las políticas de persecución y