36 dían ser litigados en las cortes comerciales de cada país o bajo las reglas generales del GATT , incorporadas en la actualidad en la Organización Mundial del Comercio ( OMC ). Con el capítulo 19 del TLCAN , Washington disminuyó el uso y abuso de los impuestos compensatorios para proteger sus industrias .
Brújula Ciudadana 92
36 dían ser litigados en las cortes comerciales de cada país o bajo las reglas generales del GATT , incorporadas en la actualidad en la Organización Mundial del Comercio ( OMC ). Con el capítulo 19 del TLCAN , Washington disminuyó el uso y abuso de los impuestos compensatorios para proteger sus industrias .
Semejante proteccionismo “ a la carta ” ha sido denunciado tanto por la delegación de Canadá como la de México . Aceptarlo , sería regresar a un escenario anterior al TLCAN , pero agravado , ya que ambos países estarían pactando y legitimando el proteccionismo selectivo y oportunista de los Estados Unidos . Ante ello , la delegación canadiense entró exigiendo elevar los estándares para la protección ambiental y laboral con el fin de evitar una suerte de “ dumping ” social y ecológico . Si bien esto apoya la posición de Washington de incluir los derechos laborales y de protección ambiental , que quedaron como “ acuerdos paralelos ” al TLCAN sin carácter vinculatorio , semejante petición busca poner en aprietos a la delegación estadounidense . La protección laboral y ambiental es más estricta en Canadá que en el resto de los socios norteamericanos . Además , la reciente salida de Estados Unido del Acuerdo de París , triunfo de las Naciones Unidas para aterrizar metas mínimas para combatir el cambio climático , podría volverse en un punto controvertido en la renegociación del
TLCAN que podría servir como carta de negociación para los canadienses .
Por su lado , la delegación mexicana se ha quedado a la defensiva . Si bien el gobierno mexicano ya ha hecho entrever que la salida del acuerdo es preferible a una renegociación desfavorable , es difícil creer que el costo de tal decisión pueda ser afrontada por la administración de Peña Nieto , en un momento además en que las campañas para las elecciones presidenciales ya se iniciaron .
Si el acuerdo se rompe será por el lado estadounidense , en un escenario en el que Trump ha usado esta amenaza más como táctica que como resultado preferible de la negociación . El problema es que la presión