Una guerra prolongada y degradada. Dimensiones y modalidades de violencia
Entre los casos documentados de sevicia, el gmh ha podido identificar como mecanismos de violencia el degollamiento, el descuartizamiento, la decapitación, la evisceración, la incineración, la castración, el empalamiento y las quemaduras con ácidos o sopletes. A la utilización de armas cortopunzantes que han acompañado estas prácticas de crueldad extrema, se sumó el uso de herramientas agrícolas que se erigieron como símbolos del terror: la motosierra y el machete. Así describen la sevicia las víctimas de la masacre de Trujillo, Valle del Cauca:
Digamos que estos son los costales donde los empacaban [ a las víctimas ]. Después de amarrados les llenaban la boca de agua y ahí comenzaban con una motosierra a cortarles todos los miembros del cuerpo. También llegaban y los cogían con unas navajas y les cortaban el cuerpo, los miembros, les echaban ácido y de ahí con uno de fuego [ un soplete ] les quemaban las heridas. 52
Del total de 588 eventos con episodios de sevicia y crueldad extrema, 371( 63 %) fueron atribuidos a los grupos paramilitares; 126( 21,4 %), a grupos armados no identificados; 57( 9,7 %), a miembros de la Fuerza Pública; 30( 5,1 %), a las guerrillas; y 4( 0,7 %), a grupos paramilitares y Fuerza Pública en acciones conjuntas. En suma, seis de cada diez casos de esta naturaleza fueron perpetrados por los grupos paramilitares, lo que revela que la sevicia fue una práctica de violencia con sello paramilitar. Esta particularidad es reforzada por la evidencia que revela la identidad de miembros de los grupos paramilitares en los casos en los que se intentó ocultar la autoría de estos hechos violentos.
Figura 6. Distribución de eventos de sevicia en el conflicto armado por grupo armado, 1980-2012. Fuente: Base de datos sevicia en el conflicto armado( 1980-2012), procesada por el gmh.
Los paramilitares construyeron una reputación de violencia a través de las masacres, los asesinatos selectivos y la desaparición forzada. Sin embargo, la apuntalaron con la sevicia, que fue empleada en una de cada diez masacres( 9,8 %) y en cuatro de cada 100 asesinatos selectivos( 4,2 %). Como particularidad de la sevicia de las masacres paramilitares, cabe anotar que fue llevada a cabo con más frecuencia en las masacres pequeñas( 65) que en las grandes( 26). Esto permite constatar que el terror constitutivo de las grandes masacres se reforzó con la sevicia de las pequeñas masacres y los asesinatos selectivos.
52. gmh, Trujillo. Una tragedia que no cesa( Bogotá: Planeta, 2008), 221.
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