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la fase previa
Las cifras, sin embargo, más significativas se dieron en el Grupo C, donde los tres primeros ganaron sus partidos por sólo 6 puntos de diferencia media; y los tres últimos los perdieron por 15,8 puntos. Números que contrastan con los del curso anterior, en los que se ganaba por 24,6 puntos, y se perdía por 32,4. O lo que es lo mismo, 18 puntos de margen en los triunfos, y 17 en las derrotas.
Sacando un promedio en los grupos de Segunda División del ejercicio 12-13, se obtienen 13,9 puntos de diferencia media en las victorias de los tres primeros clasificados; y 17,5 puntos en las derrotas de los tres últimos. A estos números no se acercan, ni por asomo, los porcentajes de cursos pretéritos, como por ejemplo los +24,8 y -27,7 (más de 10 puntos de diferencia) de la campaña 10-11; los +20,7 y 20,8 de la 09-10; ó los +17,2 y -22,6 de la 08-09. Datos reveladores que demuestran la mayor igualdad en los resultados de los partidos de la pasada temporada.
Así, el primer dato relevante es la diferencia media de puntos en las victorias y derrotas obtenidas por los equipos que acabaron en la zona cabecera y trasera. Por ejemplo, en el grupo B del curso 12-13, los tres primeros clasificados ganaron sus partidos por una diferencia media de 21,9 puntos; mientras que en el curso 11-12 fue de 28,8 puntos. Esa diferencia de siete puntos se repite en las derrotas cosechadas por los tres últimos clasificados, que pasó de tener una media de 26,4 puntos en la 11-12, a ‘sólo’ 19,3 en la pasada campaña.
Desde un prisma más individualizado, destaca el dato de que el segundo clasificado del grupo B ganaba sus duelos por una distancia media de 14,6 puntos, muy lejos de los 38,4 de la campaña anterior. Y más sangrante aún fue el subcampeón del grupo C, que venció por un promedio de 2,7 puntos, por los 24.6, 20.7, 20.6 y 21 de los años predecesores.
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