como en otras ciudades. Sin embargo,
eran pocas las calles por las cuales
podía rodar un vehículo tan moderno
como aquel Cadillac u otro similar.
Eran demasiados los huecos y lodazales en las vías en las que dominaban
los arreos, jinetes y relativamente pocos coches y carrozas lujosas tiradas
por caballos. Ni siquiera los alrededores de la casa presidencial, Miraflores,
eran transitables. La ineficacia del gobierno aunada a la pobreza de las arcas
apenas dejaban sobrevivir el ornato
dejado por las gestiones del presidente
Guzmán Blanco que marcan el período liberal y que cubre la segunda mitad del siglo XIX.
En 1905 se dictan órdenes para
construir con cemento las calzadas de
las principales calles de Caracas y no ya
solamente las aceras, refiere Arcila.
Puerto de Carenero.
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