Carta editorial
¿Por qué hablar de inteligencia artificial en esta edi-
ción? Tal parece que el concepto lo podemos encon-
trar en todos lados, la vida moderna es una inteligen-
cia que se construye a sí misma de manera artificial.
Los artefactos que constituyen nuestra realidad son
pura artificialidad pensando y actuando a favor de
nuestras necesidades.
¿Quién vive sin celular inteligente? Y ¿después qué
sigue? ¿refrigeradores que se abastezcan solos? ¿ve-
hículos que se conduzcan solos? ¿máquinas que pro-
duzcan solas? Y mejor aún ¿poemas que se escriban
solos? ¡Sorpresa! Todo eso ya existe, y ahora es inútil
preguntarnos si realmente el ámbito artificial en el que
ya estamos vertidos algún día nos va sobrepasar, ese
día no llegará, ya llegó.
La afirmación es inquietante pero no podemos decir
que nunca lo vimos venir. La inteligencia artificial es
como un monstruo con cara bonita: conoce nuestros
más profundos deseos y cada día se empeña más en
cumplirlos. ¿Quién quiere manejar un vehículo cuan-
do podríamos estar dormidos durante el traslado y que
éste lo haga por sí solo? Las fantasías se están cum-
pliendo y ahora tenemos a este monstruo creciendo
con la información personal que le damos a diario,
¿nunca te has preguntado a dónde va? Nosotros tam-
poco, pero es escalofriante. ▪
Ilustración por: Sharon Padilla
Revista Autarquía
Autarquía
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