Auschwitz, el matadero de la historia AUSCHWITZ revista | Page 7

[7] Además de ser real, Auschwitz es un símbolo de los crímenes nazis No solo murieron personas en Auschwitz. Majdanek, Treblinka, Belzec y Sóbibor también eran “campos de exterminio”, en los que como si se tratase de una línea de producción de una fábrica, las personas eran asesinadas sistemáticamente. Y tampoco fueron la excepción. En campos de concentración como el de Ravensbrück, Dachau, Buchenwald y Mathausen, entre otros, las personas morían a causa de los trabajos forzados, las torturas, el hambre o, simplemente, tras recibir un disparo. Por no hablar de los fusilamientos masivos en el barranco de Babi Yar, cerca de Kiev, o en el bosque de Ponar, a las afueras de Vilna. Entre otras atrocidades. Auschwitz es el símbolo de lo ocurrido en todos esos lugares. Los crematorios humeaban día y noche. Tras el ahogamiento producido por el gas “Zyklon B”, los cuerpos eran incinerados. Esa es una de las imágenes que no sólo Esther Bejarano, sino muchos otros que lo vieron con sus propios ojos, no serán capaces de olvidar nunca. Al igual que muchos otros supervivientes del Holocausto, hoy día Bejarano sigue hablando incansablemente de las imágenes de los crímenes de los que fue testigo. Lo ha hecho en colegios, en programas de televisión e incluso, hace pocas semanas, esta nonagenaria tuvo la oportunidad de hablar personalmente con el Papa. ¿De dónde sacaron las fotos? La verdad es que a los supervivientes no siempre se les prestó tanta atención. Y es que una vez terminada la guerra, en Alemania nadie quería haber visto ni oído nada. Ni siquiera aquellas personas que habían vivido a tan sólo unos minutos a pie de Bergen-Belsen, y que fueron enviadas por los británicos al campo de concentración para que viesen, con sus propios ojos, las montañas de cadáveres y a las personas medio muertas de hambre, que más bien parecían esqueletos andantes. Para evitar que cayera en el olvido, los británicos llevaron a cabo numerosas filmaciones. De hecho, la idea de realizar un gran documental no estaba limitada al material obtenido en Bergen-Belsen. Y es que después de liberar Auschwitz, el Ejército Rojo también se encargó de documentar lo ocurrido allí. Para abordar todo el material recabado se encargó el proyecto al gran director de la época Alfred Hitchcock. La película no vio la luz durante mucho tiempo. Mientras que los alemanes no parecían dispuestos a aceptar su culpa, en tiempos de la Guerra Fría británicos y estadounidenses no vieron conveniente buscar culpables. Tuvieron que pasar décadas para que la discusión sobre la culpabilidad de Auschwitz llegase a la opinión pública alemana. Eso sí, por entonces había llegado para quedarse. Frankfurt: los Procesos de Auschwitz y Peter Weiss El punto de inflexión del conflicto alemán con los crímenes del nazismo, y su propia culpa, fue el inicio de los Procesos de Auschwitz, que tuvieron lugar en Frankfurt entre 1963 y 1965. Los supervivientes, por primera vez, tuvieron la oportunidad de relatar las atrocidades y los detalles precisos acerca del funcionamiento del campo y los asesinatos. Y también la explotación de su fuerza de trabajo.