El siguiente paso, confió, es consolidar los proyectos en marcha en Oaxaca y replicar el modelo en otros estados como Chiapas, Durango y Guerrero, territorios que comparten desafíos estructurales, pero también una enorme riqueza cultural y humana.“ Queremos fortalecer alianzas con el gobierno, las comunidades y empresas que compartan esta visión de desarrollo sostenible. El objetivo es que este trabajo no sea temporal, sino que deje bases sólidas para un crecimiento real y continuo”, indicó. Además, busca seguir uniendo su faceta social con la artística, usando su voz y su presencia en redes para inspirar a más personas a involucrarse en causas que transforman.“ Desde cualquier trinchera, el arte, los negocios o el activismo, podemos aportar algo. Lo importante es entender que cada acción, por pequeña que parezca, puede generar un cambio real”, puntualizó
UNA RED QUE TRANSFORMA
Para Nagibe, el cambio comienza con la voluntad de participar. Su proyecto ofrece múltiples formas de involucrarse: desde el voluntariado y las alianzas empresariales hasta la aportación de ideas o conocimientos técnicos.“ Lo más valioso es que cada persona entienda que todos podemos hacer algo. Desde pequeñas acciones hasta grandes iniciativas. Buscamos crear una red de personas comprometidas con construir un México más fuerte, más justo y más consciente”, manifestó. Antes de despedirse, Nagibe deja un mensaje que resume su filosofía:“ México tiene un potencial enorme. A veces solo falta que alguien crea, que se atreva a invertir y a trabajar con la gente correcta. Nosotras, como mexicanas, deberíamos sentirnos orgullosas de eso”. Desde su activismo, su empresa y su constante presencia en comunidades oaxaqueñas, Nagibe Abbud demuestra que el cambio real no viene de la queja ni del discurso, sino del trabajo conjunto y del compromiso con las personas.
Y, como ella dice,“ cuando llegas no solo a hablar, sino a trabajar, la gente se une contigo … y el cambio comienza a ser posible”.
SOBRE NAGIBE
Con una visión que une justicia social, protección animal y cuidado ambiental, Abbud ha construido un modelo de acción comunitaria donde la participación ciudadana es el motor principal. Su compromiso no se limita a señalar necesidades: se traduce en soluciones concretas que promueven vivienda digna, acceso a la salud, educación inclusiva y generación de empleos sostenibles, siempre escuchando primero a la comunidad. Desde muy joven, Abbud dedicó su vida a las causas sociales y, en 2022, reforzó su papel como rescatista animal, brindando hogares temporales y cuidados a especies en situación de riesgo. A través de sus plataformas digitales, inspira conciencia sobre el veganismo, la protección de la infancia y los derechos de quienes históricamente han sido olvidados. Actualmente lidera proyectos de desarrollo social en Salina Cruz, Oaxaca, impulsando iniciativas sostenibles con aliados locales y estratégicos.
PROYETO OAXACA
Desde hace años ha combinado su espíritu social con su lado artístico y su visión de innovación para impulsar proyectos que promueven el desarrollo sostenible en comunidades olvidadas, como Oaxaca, que históricamente ha sido marginado de las oportunidades que ofrece la modernidad.
Aprendiendo 8