Aportes para Pensar la Salud de Personas Trans.pdf | Page 41
EXPERIENCIAS
A continuación presentamos una serie de relatos en primera persona.
Si querés sumar tu relato, podés escribirnos a [email protected]
http://capicuadiversidad.org ó https://www.facebook.com/capicuadiversidad.
Andrés (trans masculino)
Me operé en La Plata con el Doctor Poggio por un costo de $20.000 en la Clínica los Tilos. Me pidieron
exámenes de sangre varios, electrocardiograma con riesgo quirúrgico y una placa radiográfica del tórax.
Me realizó una mastectomía bilateral con masculinización del tórax. Si bien no tenía mucho busto y podía optar por la perioral, me decidí por la primera, ya que mi prioridad era quedar completamente plano.
Como soy muy flaco, corría riesgo de que realizando la perioral me queden sobrantes de piel. Según lo que
me explicó el médico, la piel de las mamas es la única del cuerpo que no se retrae, es decir, no es lo mismo
que hacer una liposucción que la piel de la panza vuelve a pegarse fácilmente.
Me operaron Poggio y Fidalgo. El trato fue muy bueno. Yo les pedí explícitamente que quería que me
dejaran los pezones lo más pequeños posibles y así cumplieron. La operación duró dos horas y media
aproximadamente. Me desperté en camino a mi habitación, tiritando de frío, producto del efecto que
produce la anestesia. Lo primero que sufrí fueron ganas de orinar y no poder aflojar la vejiga, ya que tu
cuerpo todavía esta anestesiado. Toda la noche estuve incomodo por eso: sentía muchas ganas de orinar
y me era imposible, por lo que mi madre en compañía de la enfermera me llevaban todo el tiempo al
baño. Ya me podía mover y no me mareaba, no sentía dolor porque tenía analgésicos directos conectados al suero. Al otro día los médicos me quitaron los drenajes de sangre que tenía colgando. No drené
demasiada sangre. También me sacaron el vendaje y por primera vez pude ver mi pecho completamente
plano con los dos tajos cosidos. Esa imagen es imposible de subjetivizar, era un sueño cumplido. A la una
de la tarde del día siguiente me dieron el alta. Como soy de Capital Federal, tuve que movilizarme en un
taxi. El dolor que comencé a sentir durante el viaje fue muy fuerte, teniendo en cuenta que ya estaba desconectado del analgésico directo a las venas.
Los primeros tres días son bastante dolorosos y es imprescindible que estés con alguien. No podés movilizarte mucho, necesitás ayuda para higienizarte y levantarte. Me dieron dos pastillas para tomar: un
analgésico y un antibiótico, ambos tenía que tomarlos cada doce horas. Es mejor si podés que los tomes
con leche o con un protector hepático por la mañana porque son bastante fuertes para el hígado. A los
cuatro días visité nuevamente al médico y me quitó los vendajes que tenía antes de la faja. Pero debía
continuar con la faja un mes más aproximadamente. Es muy importante que sigan al pie de la letra lo de
la faja porque es imprescindible que la piel se adhiera perfectamente al cuerpo.
Los puntos me los sacaron como a los diez días de la operación. Ese es el momento que más cuidado
tenés que tener, ya que al no tener el hilo la herida puede querer hipertrofiarse, es decir, que puede ensancharse la herida. Continué con Tresité, que es una crema para la cicatrización, y dejé los antibióticos
y los analgésicos cuando se terminaron las cajas. No sé si a todos les sucede, pero mi cuerpo comenzó
a expulsar algunos puntos internos. El médico me dijo que era normal y que se caían solos. Es un poco
desagradable ver el hilo como comienza a salirse, pero afortunadamente cayeron sin ningún problema.
No tuve infección alguna.
Yo particularmente quedé muy conforme con la operación. Quedé plano como quería y los implantes de
pezón quedaron excelentes. Mi única crítica es que, quizás, el médico fue un poco descuidado con el posoperatorio. Probablemente si me hubiese dado más recomendaciones o cremas, la cicatriz no hubiese quedado
tan hipertrófica como quedó (es decir ancha). Según lo que me explicó era necesario estirar la piel para realizar la sutura por eso sucede esto, pero que es algo que se arregla con una operación ambulatoria. La verdad
es que me parece raro que no recomiende una cinta o algo similar para evitar que las heridas se ensanchen,
al menos eso es lo que vengo viendo y leyendo hace mucho tiempo. Por lo demás, me parece un médico
súper recomendable y prolijo en su trabajo. De lo mejor que tenemos en Argentina.
Georgina Trinidad Collicheo
Yo pienso que la cirugía es primordial para el cuerpo de las chicas, es un arma muy poderosa para la
transformación del cuerpo, justamente para poder reflejar nuestra identidad y cómo nos sentimos. Son
necesarias, claro, aunque no todas podemos, por una cuestión económica, acceder a ellas.
Yo me pondría prótesis, porque tengo silicona líquida. Pero no me haría una reasignación genital,
una vaginoplastía porque… no sé, me siento bien con mi cuerpo, lo disfruto, me gusta cuando me miro y
41