Aportes para Pensar la Salud de Personas Trans.pdf | Page 30

gún las costumbres y patrones de cada cultura, como usar la vestimenta, el peinado, los maquillajes, los cosméticos, los perfumes y/o los colores asignados socialmente para el género de elección, así como adoptar sus posturas, gestos y tonos de voz. Dominar estas técnicas sin dudas es un arte que se transmite y se perfecciona de generación en generación y puede usarse, además de para habitar los patrones culturalmente dados del género de elección, para permitirnos, también, una exploración con/entre las fronteras de los géneros. A continuación este capítulo ofrece una serie de estrategias, divididas entre aquellas útiles para feminidades o masculinidades trans, ordenadas en tres niveles: algunas técnicas no invasivas, una primera aproximación a los tratamientos de hormonación que generalmente se utilizan y una presentación de las cirugías que pueden llevarse a cabo. El objetivo es difundir la información necesaria para que cada una de las personas que está evaluando iniciar algún tipo de exploración en los géneros y/o en su construcción corporal tenga una plataforma para pensar los procesos que, en cada caso, estaría eligiendo y exponer las diversas opciones que se tienen al respecto. Estamos convecidxs de que parte de empoderar a nuestra comunidad es fortalecerla con conocimientos. A su vez, este material pretende ser útil e interpelar a aquellxs efectorxs de salud que estén interesadxs en empezar a involucrarse o que quieran actualizarse en el tema. Hay que tener en cuenta que como la Ley de Identidad de Género fue sancionada hace poco tiempo, la realidad es que no todxs lxs efectorxs y profesionales de salud tienen información suficiente y actualizada y, en ese sentido, es fundamental encontrar médicxs capacitadxs ya que es nuestro cuerpo el que estamos poniendo en sus manos. Por eso, si lo que querés es iniciar un tratamiento hormonal y/o alguna cirugía, lo mejor es buscar la información e interiorizarse sobre los mismos a través de organizaciones trans y de consultar a personas que hayan pasado por la experiencia y/o trabajen en el sistema de salud y conozcan estos protocolos. (En el Capítulo VII de esta guía ofrecemos una lista para contactar con las organizaciones que pueden asesorarte y con servicios médicos amigables.) Una vez que hemos encontrado profesionales de confianza se les puede solicitar alguna dirección de mail o un número de teléfono de referencia para poder establecer un contacto rápido. En este caso, es importante hacerles notar que para nosotrxs no es lo mismo ir a una guardia médica o un consultorio privado cualquiera, ya que no todxs lxs profesionales cuentan con los conocimientos adecuados y actualizados. Políticamente muchas de nuestras construcciones trans no persiguen lo que la medicina entiende como una feminización o una masculinización “completa”, sino que decidimos habitar de una manera singular el proceso jugando con los límites del género. En ese sentido, es importante que lxs trabajadorxs de salud tengan presente que elegir una terapia hormonal no supone, automáticamente, el deseo o la necesidad de una operación de “reasignación genital” o de cualquier otra clase. Con el tiempo, los activismos trans hemos reparado no sólo en la aventura de género que nos propone la hormonación sino también en ciertos riesgos que puede acarrerar: después de cierto tiempo las terapias hormonales atrofian órganos de los sistemas genitales, produciendo no sólo la esterilidad, sino, en muchos casos, la necesidad médica de extirparlos mediante cirugías. Las llamadas hormonas gonadales –estrógeno y testosterona- son necesarias para el funcionamiento del organismo por lo que su ausencia puede producir trastornos graves. Una vez que dejamos de generarlas, por la atrofia que puede producir el tratamiento hormonal, el proceso se vuelve irreversible y el tratamiento hormonal se convierte en obligatorio de por vida. Por eso, es fundamental que si decidís iniciarlo, lo empieces y lo continúes siempre con seguimiento médico que pueda dar cuenta tanto de los cambios externos como de los internos. Y te recomendamos hablar sinceramente con lxs médicxs no sólo sobre tus expectativas en relación con los cambios corporales sino, también, sobre los planes de vida que tenés a largo plazo para que puedan consensuar un tratamiento que cumpla de la mejor manera posible con tus deseos sin descuidar la salud, ya que tienen la obligación de evacuar todas tus dudas y de acompañarte en el proceso sin imponerte su propia valoración. Y es muy importante de parte de lxs trabajadorxs de salud recordar que su obligación no es señalar un camino automático de intervención médica que logre una adaptación lo más rápida posible al estereotipo de género de elección, sino exponer a la persona interesada lo más detalladamente posible las opciones de tratamiento en relación no sólo con los beneficios sino con las consecuencias que puedan desarrollarse. Desde esta perspectiva, es fundamental proponer una buena escucha que permita subrayar los deseos individuales de cada unx para realmente acompañar a las personas trans en nuestras decisiones sin que se nos impongan parámetros y/o prejuicios. 30