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(*17) A propósito, y al igual que señaláramos en nuestra nota (*13) más arriba, este
segundo momento de transformación que Da Matta sostiene se da en la “doble tarea del
etnólogo” tiene también una suerte de correlato con la historia de la Antropología, ya que
esta transformación—ahora ya de lo familiar en exótico—
[…] parece corresponder al momento presente [de la Antropología], cuando
la disciplina se vuelve para nuestra propia sociedad, en un movimiento
semejante a un autoexorcismo [, ya que se trata de descubrir las prácticas
culturales] en nosotros, en nuestras instituciones, en nuestra práctica
política y religiosa.
nos dice el autor. Y continúa apuntando lo siguiente que ya citáramos en el cuerpo principal
de nuestro ensayo (*15):
El problema es entonces el de quitarse la capa de miembro de una clase y
de un grupo social específico para poder —como etnólogo— extrañar alguna
regla social familiar, y así descubrir (o recolocar, como hacen los niños
cuando preguntan los “por qué”) lo exótico en lo que está petrificado dentro
de nosotros por la reificación y por los mecanismos de legitimación. (Da
Matta, op.cit., pp.174-175)
Nuevamente —y a pesar de estimamos que esta parte de la argumentación dentro del
ensayo de Da Matta es interesantísima—, no desarrollaremos más sobre la correlación entre
estas dos transformaciones, por un lado, y la historia de la Antropología, por otro,
mayormente por cuestiones de espacio y relevancia respecto de los aspectos puntuales del
problema que nos ocupa.
(*18) Como tan adecuadamente sostiene Da Matta en la cita que usamos a modo de
epígrafe en nuestro ensayo aquí, y que dice:
[…] la Antropología Social es una disciplina de conmutación y de mediación.
[…] es en la Antropología donde necesariamente se establece un puente
entre dos universos (o subuniversos) de significación, y tal puente o
mediación se realiza con un mínimo de aparato institucional o de
instrumentos de mediación. Vale decir, de manera artesanal y paciente,
dependiendo esencialmente de humores, temperamentos, fobias y todos los
otros ingredientes de las personas y del contacto humano. (Da Matta,
op.cit., p.174)