AMER Mexico Rural Tomo II AMER Mexico Rural Tomo II | Page 35
28
EDUARDO SANTIAGO NABOR
Identificación de algunos elementos en la construcción de identidad femenina en mujeres
En el caso de los hombres fue común el trabajo de veladores o algún oficio
que les permitiera llevar más ingreso a su hogar. Algunos dejaron el campo
como lo habían hecho sus antecesores y se incorporaron a otras actividades,
especialmente oficios como albañilería, carpintería, herrería, entre otros.
El caso de las mujeres es mucho más complejo, pues depende de las
condiciones y posición que ocupen dentro de un grupo doméstico. Esto es parte
de las transformaciones que dentro del hogar se han dado en este contexto amplio
que se ha descrito. Como señala Diane Wolf (1992), estos procesos de desarrollo
económico y productivo trastocaron las estructuras íntimas de la sociedad,
en este caso las dinámicas intrafamiliares. En nuestro caso es importante
señalarlo, puesto que de ese modo los contenidos y sentidos de los discursos
y prácticas de lo femenino cambian. Las mujeres comenzaron a socializar que
salir y trabajar era parte del ser mujer. Esto podemos percibirlo en el tiempo,
cuando la acción de las mujeres va evidenciando las contradicciones dentro
del hogar; especialmente en aquellos cuya autoridad del padre condicionaba la
dinámica que en general organizaba a los miembros del hogar. Hace al menos
cuarenta años las mujeres dependían del permiso del padre para salir a trabajar.
El cambio en la posición de la mujer dentro de sus hogares, principalmente por
el aporte al ingreso del hogar, deja margen para que tomen decisiones sobre
su economía y su vida. Que también ha permitido un proceso de revolución
sexual de las mujeres de las últimas generaciones.
Como en muchos lugares que fueron sufriendo la modernización de su
industria y producción local, se presentaron fenómenos como un alto grado
de madres solteras, formación de parejas en edades entre los 15 y los 20 años,
consecuentemente el abandono de la posibilidad de estudiar. Un fenómeno
que no es general pero por sus implicaciones es importante señalar, fue el de
los casos de mujeres que se insertaban en la oferta de servicios sexuales. En
algunos de ellos, mujeres que se entrevistaron, declararon haber trabajado
en bares o centros botaneros donde fichaban 3 y en muchos casos prestaban
servicios sexuales. Esto había durado algunas temporadas o era de manera
permanente, de tal modo que ir a la congeladora o al campo se había vuelto la
opción. Esto no es siempre y depende tanto de las condiciones de su hogar y
de sus hijos, como de la estacionalidad de la siembra de fresa. Esta actividad
es común en algunas mujeres cuya condición es muy adversa, que no logran
Aunque la referencia no es única de la región, la palabra fichar en este contexto significa sentarse
en la mesa de un cliente del bar para tomar cervezas. Por cada cerveza que toman el bar les da
una comisión. La idea es que el cliente siga tomando y así invitando a la mujer. Por cada cerveza
el mesero le da una ficha a la mujer que cambia por efectivo al final de la jornada. Una mujer con
experiencia en esta actividad llega a tomar hasta cuarenta cervezas de 250 ml.
3