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PTVAL
El nuevo paradigm
Educación Especia
“En un mundo lleno de diferencias la norm
Isabel Guerrero
PTVAL
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T
radicionalmente se ha venido identifi-
cando la Educación Especial (EE) con
la disciplina que tiene por objeto aten-
der, desde el punto de vista de la peda-
gogía, a aquellos sujetos que presen-
taban algún tipo de discapacidad que
les impide su desarrollo normalizado y
el aprendizaje de determinados conte-
nidos con la metodología habitual. Se
ha utilizado para designar a un tipo de
educación diferente a la ordinaria, que
discurría por un camino paralelo a la
educación general; de tal forma que el
niño o niña al que se le diagnosticaba
una deficiencia, discapacidad o minus-
valía, era segregado a la unidad o cen-
tro específico.
La EE iba dirigida a un tipo de alum-
nado, aquellos que tenían un cierto
déficit que les hacía parecer bastante
diferentes del resto del alumnado con-
siderado como normal.
Para entender el concepto que hoy
tenemos de la discapacidad hemos de
remontarnos a siglos atrás, años en los
que el destino de las personas con dis-
capacidad no era demasiado halagüe-
ño. Un halo entre la negatividad y lo
puramente asistencial comenzaba a
extenderse, llegando hasta el siglo XIX,
que supuso un punto de inflexión en la
conceptualización de la discapacidad.
En este siglo, las personas con disca-
pacidad se convierten en objeto de es-
tudio, lo cual hace que se avance en la
comprensión que de estas personas se
tenía, desarrollando para ello terapias
clínicas.
Pero, ¿cuándo surge le termino que
en la actualidad conocemos como Di-
versidad Funcional?
En la actualidad estamos viviendo
una época donde la educación especial
segregadora va siendo sustituida, pau-
latinamente, desde el año 60 del pasa-
do siglo, por el concepto de integración
educativa en la mayoría de los países
desarrollados, entre ellos España, con
toda una serie de formulaciones teó-
ricas y disposiciones legales incorpo-
rando a los alumnos con dificultades,
de acuerdo con sus diferencias natura-
les, en diferentes contextos mediante
experiencias integradoras que puedan
referirse a aspectos físicos, intelectua-
les, culturales, etc. bajo el amplio aba-
nico de la diversidad.
La normalización de servicios, que en
el ámbito educativo supone la integra-
ción escolar, ha dado paso a una con-
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