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la intromisión de lo diabólico (el demonio tentador y cómplice, sombra y alter ego) no es exclusiva de Goethe (tenemos una ineludible referencia literaria, El diablo enamorado, de Cazzote, publicado en 1772, y Manuscrito encontrado en Zaragoza, de Jan Potocki, de 1805), ni tampoco la salvación de Margarita y, en la postrer redención (que recuerda a la ascensión de Hércules de la mitología griega), del propio Fausto.“Y es que, aunque es inn egable la existencia de la fuerza maligna en el mundo real, no se puede afirmar que esta fuerza se presente personificada, transformada en un hombre concreto dotado de facultades tan curiosas como la de aparecer en forma de perro, es decir, con la capacidad de superar las fronteras del tiempo, del espacio y de la materia.”19 y mundos de ficción, Buenos Aires, Biblos, 2006, pp. 89-102. Goethe,“Fausto”, en Obras completas, Madrid,Aguilar, traducción y edición de Rafael Cansinos Assens, pp. 1135-1362. Janés, Alfonsina, “Vivencias fantásticas y reducción humana, o la contradicción de Fausto”, en Revista de Filología Alemana, 2000, 8: 95-113. Reuter, Jas, Fausto, el hombre, México, Fondo de Cultura Económica, 1985. Léon-Dufour, Xavier, Diccionario de teología bíblica, Barcelona, Herder, 1965. Miéville, China,“Marxism and Fantasy:An Introduction”, en David Sandner, ed. Fantastic Literature. A La figura de Mefistófeles en tanto adversario de Critical Reader, Westport, Praeger, 2004, pp. Dios es, al cabo, una metáfora del modo en el que 334-43. el hombre moderno, en la concepción goethiana del término, encarna una oposición a cierto Muchenbled, Robert, Historia del diablo. Siglos xiidogmatismo religioso, por un lado; por otro, evidencia xx, México, Fondo de Cultura Económica, 2011 la contradicción del pensamiento racional, que no [Una histoire du diable. xiie-xxe siècle, Éditions puede mostrarse ajeno a la tradición en la que se du Seuil, 2000]. inserta y evidencia cierta afinidad al modo en el que se concibe nuestro estar-en-el-mundo. La dualidad Ricœur, Paul, Relato: historia y ficción, México, Dosfilos editores, 1994. entre Fausto y Mefistófeles es arbitraria y necesaria sólo en términos de formulación textual: al cabo las Risco,Antonio, Literatura fantástica de lengua española. dos facetas se corresponden con la situación del ser Teorías y aplicaciones, Madrid, Taurus, 1987. humano atormentado entre el conocimiento y los Russel, Jeffrey Burton, El Diablo, Barcelona, Laertes, deseos carnales, y al mismo tiempo capaz de burlarse 1995 [The Devil, Cornell University, 1977]. de sí mismo y su circunstancia, su tradición, su afán de ir más allá de sus claras limitaciones. Adversario que Russel, Jeffrey Burton, El príncipe de las tinieblas. El poder del mal y del bien en la historia, Santiago se mira en el espejo, la imagen de Fausto persiste en de Chile, Andrés Bello, 1996. preguntarse y preguntarnos sobre el modo en que pensamos y actuamos en nuestro mundano devenir. Safranski, Rüdiger, El mal o el drama de la libertad, Barcelona, Tusquets, 2000, 286 pp. Bibliografía Sichère, Bernard, Historias del mal, Barcelona, Gedisa, 1996 [Histoires du mal, París, Grasset & Fasquelle, Carpentier, Alejo, El reino de este mundo, Barcelona, 1995]. Seix Barral, 1986. Domínguez de Rodríguez Pasqués, Petrona,“Nuevas Swedenborg, Emmanuel, Del cielo y del infierno, Madrid, Siruela, 2002. relaciones entre el discurso narrativo y el ficcional”, en Diana B. Salem (coord.) Narratología Walton, Kendall, Mimesis as Make Believe, Cambridge, Harvard University Press, 1990. 19 40 Alfonsina Janés, op. cit., p. 96.