Agenda Cultural UdeA - Año 2013 MARZO | Page 8

ISBN 0124-0854
N º 196 Marzo de 2013 del atrevido escribe:“ En bionergética es bien conocido que al acercar cualquier sustancia tóxica a un paciente, su pulso presenta una reacción de rechazo fácilmente reconocible por el médico entrenado. Estos cambios se presentan, en casos de personas sensibles, incluso cuando el tóxico se encuentra a unos dos metros del paciente”. Con razón dicen que en el manicomio no están todos los que son.
Advirtamos que para su veneno ya tienen listo el antídoto:“... por desgracia nos vemos obligados a abandonar el terreno de lo científicamente verificable, porque los instrumentos que permiten medir esos fenómenos aún no han nacido de las mentes de los creadores”. Viejo truco para lavarse las manos y no comprometerse a comprobar lo no comprobable.
Cháchara cuántica
Hay tonterías recurrentes, como las cadenas de la suerte, los poderes de ultratumba de la ouija o las apariciones de la Virgen en multitud de objetos cotidianos. Son perdonables, pues van dirigidas al pueblo raso, pero lo que no es perdonable es que supuestos intelectuales vuelvan de nuevo con los misteriosos efectos de la mecánica cuántica. ¿ Y tú qué sabes?( What the Bleep do we know) es la película de moda: efectos cuánticos macroscópicos, mezclados con superación personal y opiniones de
videntes, teólogos y físicos, entre otros. La cinta vende, además de los videos, camisetas y otros elementos, de tal manera que, para comenzar, ya ha generado más de dieciséis millones de dólares. Y eso es lo que pretende, vender, pero los amigos del misterio lo aprovechan como prueba que apoya sus elucubraciones.
Como una partícula puede seguir al mismo tiempo varias rutas o estar en varias partes a la vez, y es el experimentador el que lo determina, entonces— apunta un prestigioso médico alternativo— debemos cambiar de paradigma: pasar del“ ver para creer al creer para ver”. Una verdad que todos los sicólogos saben y que no tiene nada que ver con fenómenos cuánticos: percibimos muchas veces, por autoengaño, lo que creemos; o, puesto de otro modo, nuestros prejuicios influyen notablemente en la percepción, pero sin misterios cuánticos de por medio. Todo nace de la ignorancia de un tema atractivo pero que, por su nivel de exigencia, está vedado a la mayoría de los mortales: la mecánica cuántica. Pero las especulaciones espirituales de leyes materiales mal digeridas forman parte de cierta cultura popular. Ciencia ficción convertida en ciencia realidad.
Existe una ley de fácil comprobación: cuanto más ignorante en los temas de una ciencia sea el sujeto, más amplias y atrevidas serán sus extrapolaciones. Y es justo en la mecánica cuántica y en la física relativista en