N º 173 Febrero de 2011 pidió que le tradujera la conversación por teléfono.
La chica se aterrorizó y prorrumpió en un llanto terrible. Yo la oía llorar al teléfono y me di cuenta de que no le salían las palabras. Estaba totalmente desesperada. Cada vez que lo pienso se me pone la piel de gallina.
Entonces dijo:“ No puede ser, soy virgen, no estoy embarazada”. Y continuó negándolo. Añadía que podía probar que era virgen.“ Tengo una sutura”. Ella no podía haberlo hecho con ningún chico, porque la sutura estaba intacta.
El médico intentaba calmarla y le prometió que volvería a hacerle otro análisis de orina.
Un tiempo después me llamaron por teléfono. La misma historia. El médico explica a la chica somalí que tras analizar de nuevo su orina era irrefutable: estaba embarazada. Él le preguntó si no había tenido ningún tipo de instrucción sexual, a lo que ella respondió:“¿ Para qué necesito información sexual? Me tengo que casar virgen”.
Explicó que apenas llevaba un mes en Holanda. Un chico somalí que llevaba un tiempo residiendo en el
país y que hablaba neerlandés la había ayudado en todas partes. Siempre la había acompañado a su abogado. Un día la invitó a ella y a dos amigas somalíes a su casa, en Dordrecht. Allí intentó conquistarla. La llevó al dormitorio y las dos amigas se quedaron en la sala de estar. Quería llevársela a la cama y la desvistió. Él prometió no desvirgarla. Le recordó que la había ayudado y que ella ahora debía ser para él.
El médico tuvo que sonsacarle la historia. Ella explicó que el chico no la había penetrado con su pene, sino que sólo se había restregado contra sus partes externas. Eyaculó sobre ella, pero su sutura quedó intacta. Tanto en la experiencia de la chica como en la del chico ella había permanecido virgen.
El médico le explicó cómo podía quedarse embarazada, para lo cual era necesario que un hombre y una mujer tuvieran una relación sexual. Le explicó que algunas mujeres son más fértiles que otras y que en un ciclo hay períodos más fecundos y menos fecundos. Ella tuvo la mala suerte de que aquel día estaba en sus días fértiles, y por ello se quedó embarazada con tan sólo, quizás, una gota de esperma.