Agenda Cultural UdeA - Año 2010 ABRIL | Page 6

ISBN 0124-0854
N º 164 Abril de 2010
El dolor y la desesperanza, que han sido permanentes en su vida, afloran ahora con más fuerza y nitidez poética. Lo que ve y siente Miguel fluye en forma de verso; quien los lee, una vez se han posado en el papel, ve en ellos la humanidad, lo que es común a ella; por tanto, degustarlos e identificarse prácticamente son un solo suceso.
La comunidad humana no ha superado la práctica de la guerra; recurre a ésta siempre que una parte, por cualquier motivo, decide sojuzgar a otra, ¡ he ahí la razón por la cual la obra de Miguel Hernández es tan actual! Aún hoy, los sueños son fusilados o enrejados; los ayes y la sangre brotan de gargantas y cuerpos; aún hoy“ el hombre acecha al hombre”, buscando socavar los valores que ponen a la especie humana en un punto avanzado de la filogenia animal. Las imágenes de la garra, el animal, la fiera dan cuenta de lo primitivo, aquello que la conciencia colectiva cree haber superado, pues la barbarie ha dado paso a la civilización; sin embargo, para hacer la guerra y mantenerla, se recurre a llamarlas a escena nuevamente. Fue esa tensión la que el poeta hizo verso: su devoción por la humanidad, por el arte, por la cultura, por la ciencia, siendo mutiladas por las expresiones más primitivas del comportamiento humano.
A juzgar por lo vivido y padecido, desde la muerte del poeta( marzo de 1942) hasta hoy, los pocos y maravillosos versos de este libro serían unas cuantas centenas más. Ha corrido el tiempo … pero ha persistido, en quienes administran el patrimonio colectivo de la humanidad, la estrategia de fomentar lo primitivo, dejando al azar o a luchas individuales la posibilidad de realizar y degustar expresiones sublimes del depurado cerebro humano.
Lía Isabel Alviar Ramírez es profesora de la Universidad de Antioquia en las Facultades de Ingeniería y Derecho y Ciencias Políticas.