Agenda Cultural UdeA - Año 2009 FEBRERO | Page 7

ISBN 0124-0854
N º 151 Febrero de 2009
lugares comunes heredados, la raíz de esta universalidad no es la“ racionalidad humana”, sino que esta raíz está en la imaginacion creadora como componente nuclear del pensamiento no trivial. Todo cuanto fue imaginado por alguien con suficiente fuerza para modelar el comportamiento, el discurso o los objetos puede en principio ser re-imaginado( representado de nuevo) por algún otro” 8.
El imaginario cultural, en tanto depósito infra-estructural del conjunto de la experiencia filogenética de la humanidad, alude a ese“ dominio intermedio” del que habla Heiddeger( en referencia a Holderlin) y desde el que el grupo dialoga con la trascendencia inmanente acometiendo la tarea de fundar poiéticamente el ser, funge como“ la madre de todo ideal” 10, como soporte cultural del“ hacer creer”“ psicosocial, como“ universo intermedio” en el que lo espiritual toma cuerpo y el cuerpo se torna espiritual” 12; en definitiva, como entramado de huellas mnémicas o fósiles vivientes( arquetipos) legados por la humanidad pretérita que aparecen como hilo conductor que anima, emparentándolas, todas las estructuras de intersubjetividad e imágenes del mundo dadas en la historia con independencia del mayor o menor grado de racionalidad, diferenciación funcional o desarrollo de las fuerzas productivas, todo lo cual promueve en el nivel de las imágenes la“ solidaridad total del genero humano” 13. Por ello, G. Durand habla de un ecumenismo de lo imaginario, del contenido liberador y eufemizante que se cobija en el cuadro universal del imaginario humano entendiendo por tal“ el gran denominador fundamental donde se sitúan todos los procesos del pensamiento humano14.
De esta suerte, se constata que la“ consanguinidad” existente entre las distintas formas de vida humana transita por los bajos fondos de la común infraestructura imaginaria, por el latente feudo de posibilidades arquetípicas de auto-representación social que, con independencia del decurso del tiempo vacio y homogéneo( Benjamin) de la historia acumulativa, pervive incólume en la atemporalidad siempre viva de la memoria filogenética. Por lo mismo, queda invalidado uno de los axiomas que más ha influido en el pensamiento ilustrado de la modernidad occidental. Se trata de la hegemonía de la razón, entendida como facultad intelectual caracterizadora de la vida humana y equitativamente diseminada por el universo en su conjunto, con cuyo empleo crecen las esperanzas de la humanidad para liberarse de las ataduras del pasado, de la fe, de la tradición ciega, del dogma […]
Notas
1 Schluchter, W, Max Weber’ s Vision of History, Berkeley, Blackwell, 1984, pág. 17. 2 Jung, C. G., Simbología del espíritu, México,. F. C. E., 1981, p. 296. 3 Von Franz, M-L., Jung. Su mito en nuestro tiempo, México, F. C. E., 1981, p. 111. 4 Bellah, R.. Bevond Belief, Nueva York, Harper and Row, 1991, p. 115.