ISBN 0124-0854
N º 149 Noviembre 2008 de la guerra y percibidas como sujetos pasivos , sin palabra ni participación , como clientes de una eventual reparación económica librada a lo que buenamente entreguen los victimarios y de la cual se han borrado los referentes simbólicos y culturales . Las grandes críticas a ley se han dado en los escenarios de la justicia , de los delitos y las penas , del estatus político otorgado a los victimarios y de los riesgos implícitos de incluir narcotraficantes entre los beneficiarios de las amnistías y los indultos , aspectos que bien vale la pena discutirse , por supuesto , pero nadie ha preguntado por la verdad , no se ha considerado importante el esclarecimiento histórico , no se contempla la realización de duelos colectivos que contribuyan a transformar las dinámicas bélicas y se llama a las víctimas y a las sociedades al perdón y a la reconciliación , sin que medien mínimos elementos que lo posibiliten ; es decir , contrario a las tendencias internacionales , nuestras víctimas siguen siendo parte del paisaje . 3 . Las víctimas y su ambiguo lugar en los duelos colectivos Las víctimas serían los actores por excelencia de un duelo colectivo , pero un duelo colectivo es algo más que la puesta en público del dolor y el sufrimiento , y sus propósitos tienen que ir más allá de los relatos memoriales y de las historias particulares de cada quién , debe ser incluyente , plural polifónico si es que se pretende con él reconstruir el orden social roto por la guerra y establecer la relación presente-futuro a través del pasado .