Agenda Cultural UdeA - Año 2007 SEPTIEMBRE | Page 18

ISBN 0124-0854
N º 136 Septiembre de 2007 la casa donde Zoé, la emperatriz era poseída por un sajón al que le había mandado sacar los ojos; el lugar donde los monjes de la Santísima Trinidad definieron la doctrina que no se nombra y se cortaron la lengua unos a otros para no revelar el secreto; el lugar en donde pasó una noche de penitencia Constantino el Coprónimo por haber abrigado deseos impuros del cuerpo de su madre; el sitio donde los mercenarios germanos hacían el juramento secreto que los ligaba a sus dioses; el lugar donde amarró el primer trirreme veneciano que trajo la peste álgica; así podría enumerarle muchos otros refugios del alma secreta de la ciudad, que me fueron revelados por mis dos compañeros felinos.
Obregón entendió como nadie este interés del Gaviero por los gatos y, a su vez, comunicó a éste algunos de los prodigios que había presenciado en Cartagena, protagonizados por gatos que ocasionalmente visitaban su taller. Entre ellos, el gato romano que se puso frenético el día en que el pintor empezó a dibujar en la tela un ángel que le daba la espalda al visitante y, luego, el gato que daba extraños saltos y volteretas cuando se le mencionaba el nombre del arzobispo virrey Caballero y Góngora. Al llegar la mañana, la amistad entre los dos recién conocidos se había hecho tan estrecha como si se hubiesen encontrado hacía muchos años […]
El plegado turco
Notas
1. En este relato Álvaro Mutis hace un homenaje al pintor Alejandro Obregón( Barcelona, 1920-Cartagena, 1992), incluyéndolo en la ficción como un personaje que se hace amigo entrañable de Maqrroll el Gaviero, personaje emblemático de su saga narrativa.
2. Theotokos, en griego, significa madre de Dios.
3. El Cuerno de Oro, con una extensión de unos ocho kilómetros, es un puerto natural que no sólo divide la ciudad de Estambul en dos partes: la ciudad vieja y la parte de Gálata, sino que ha influido de manera decisiva en su desarrollo. Recibió este nombre debido a las tierras fértiles que antiguamente lo rodeaban,