ISBN 0124-0854
N º 130 Marzo de 2007 obstruye con nada. Un amigo le escribió a otro:“ te quise como buenamente pude”, y la frase falleció antes de que le llegara por culpa del“ buenamente”, que no filtraba bien el afecto. Se la podía haber mandado desadverbiada:“ te quise como pude”, pero habría quedado raquítica. El adverbio, si es bueno, matiza mucho la amistad, la hace más digerible y llevadera. Pero hay pocos y el trasplante te cuesta un riñón.
* Juan José Millás( Valencia-España. 1946). Escritor y periodista de reconocida trayectoria. Ha publicado, entre otros, los libros: Cerbero son las sombras, Visión del ahogado, El jardín vacío,
Papel mojado, El desorden de tu nombre, Primavera de luto, La soledad era esto( Premio Nadal), Volver a casa, Ella imagina, Algo que te concierne, Trilogía de la soledad, El orden alfabético, Cuentos de adúlteros desorientados, Todo son preguntas y Laura y Julio. Los cuentos aquí incluidos fueron tomados de Cuentos a la intemperie. Madrid, Acento Editorial, 1997, pp.
111-114.
De todos modos, algunas novelas muertas pueden venderse como vivas con la ayuda de un forense poco escrupuloso y el amor del novelista. Pero hay que sacarles las vísceras, que se descomponen en seguida, y rellenarlas de serrín.