ISBN 0124-0854
N º 135 agosto de 2007 la mujer y huyó presurosa a ocultarse en la selva.
“ Carabí”
Carabí fue un jaibaná o brujo memorable que vivió por las regiones del Alto Andágueda. Carabí vivía con su mujer y tenía una hija adolescente. Una noche, cuando Carabí y su mujer dormían, llegó un indígena joven y, sin que los indígenas se dieran cuenta, cohabitó con la doncella.
Hacia las cuatro de la mañana, el joven se levantó y se metió debajo de un montón de leña que había en la casa.
Ya de día, la muchacha se fue a traer otro viaje de leña y le encargó a la mamá que no gastara más de la mitad del montón que había en la cocina, mientras ella regresaba. La mamá no le hizo caso y, cuando su hija se fue, movió toda la leña. En el asiento estaba enroscada una culebra venenosa. Era el joven amante que se había convertido en serpiente. La culebra, ágilmente, clavó sus colmillos en
Cuando llegó Carabí, que a todas estas estaba cazando en el monte, y encontró a su mujer grave por la picadura venenosa, se puso a seguir el rastro de la serpiente y la encontró en el bosque cerca del tambo, comiendo hierba junto a otra culebra.
Carabí cogió de esa hierba y la llevó a la casa, la machacó bien, hizo un brebaje y lo dio a su mujer y con él le bañó el cuerpo, con lo cual quedó completamente aliviada.
Cuando regresó la muchacha, recriminó a su mamá porque había movido todo el montón de leña y no alcanzó a decir más porque al instante quedó, ella también, convertida en culebra y huyó veloz al monte en busca de su compañero.