ISBN 0124-0854
N º 119 Marzo de 2006 manifiesta una sensibilidad propia de pocos hombres, un anhelo y nostalgia por la vida ya perdida, al crepúsculo de este estado complejo, incomprensible e inimaginable que llamamos vida, del cual solo sentimos su grandeza y dolor, sin que seamos capaces de pronunciar una palabra adecuada para explicarlo.
Estos tres Mozart que personalmente he clasificado, no representan más que aspectos particulares de un único individuo genial, Mozart; así mismo, las obras que he citado y que se pueden citar no representan más que aspectos particulares de una única obra genial, compuesta por todas sus obras, por todas sus piezas, por cada página de las partituras que él, quizás en solitarias noches, escribió.
De esta misma forma, no podemos creer que haya diferentes Físicas, cuando realmente no hay más que una sola. No podemos negar, sin embargo, que hay aspectos tan diferentes en ésta que la confusión presente no es inocente. Quiero citar ahora unos pocos ejemplos que faciliten mi exposición. Cuando estudiamos y leemos sobre relatividad general, la cual ha sido considerada como una de las teorías más bellas escritas en física, nos maravillamos porque desde ella se pudo observar el movimiento de los cuerpos celestes y la caída de los cuerpos a través de la geometría del espacio-tiempo. Y lo hizo de la forma más
simple posible: las trayectorias de los cuerpos en este espacio no son más que geodésicas, es decir, trayectorias de distancia mínima entre dos puntos; en un plano, por ejemplo, la trayectoria más corta entre dos puntos es una recta, la cual, sin duda es la más simple entre ellos. De esta simpleza, su elegancia, sin reducir su eficacia para explicar fenómenos sumamente complejos, como la trayectoria de Mercurio alrededor del sol, y predecir otros fenómenos no soñados antes de ella, como los agujeros negros.
Por ello, no puedo dejar de pensar en elegancia y estética cuando estudio relatividad general. Pero hay teorías cuyos principios no son tan fáciles de imaginar y la hacen mucho más compleja de presentar: las teorías del mundo subatómico, cuya explicación corresponde a la mecánica cuántica, la cual nos resulta sumamente difícil de entender por el simple hecho de que en las dimensiones en las cuales vivimos no se presentan fenómenos cuánticos, diferentes de los fenómenos clásicos, en los cuales vivimos a diario.
También podríamos pensar que los intereses de la física teórica de altas energías difieren de los intereses de la óptica, por ejemplo; pero no podemos clasificar objetivamente la importancia de cada área en el marco global, la física, la cual posee intereses únicos. No podemos tampoco decir que determinado