Tomado de la Revista Marie Claire
ISBN 0124-0854
N º 76 Marzo de 2002
Estas mujeres me trataban como si fuera un la familia . No se cansaban de abrazarme y así las recuerdo : alzándome , sosteniéndome y estrechándome contra su cuerpo . Yo ya era mayorcita , pero me llevaban en brazos como si fuera un bebé . Las adoraba , ¡ eran tan maravillosas ! A medida que se recuperaban de la guerra , se iban tornando más grandes , hasta que volvieron a su tamaño natural , que era enorme . Yo me sentía emocionada ante ellas . Rastrillaban , cavaban y revolvían la tierra , sembraban , regaban y cosechaban . Hilaban y tejían y hacían encaje y crochet . Ellas me enseñaron lo que es la expresión " muslos de trueno ": una mujer que hace estruendo cuando camina ; se la puede oír cuando llega porque sus muslos se rozan entre sí . Recuerdo estar sentada a su lado a la noche , mientras me contaban cuentos , rodeándome con sus brazos ... ¡ Qué grandes y agradables eran las tías , cómo me ayudaban y qué segura me sentía a su lado !
Grandes mujeres tehuanas Luego hubo otro acontecimiento que influyó en mi aceptación del tamaño ; ocurrió cuando tenía poco más de treinta años . Volví al istmo de Tehuantepec , en México , para conocer a algunos miembros de mi familia ancestral . Y allí encontré a otras mujeres de gran tamaño , que me veían demasiado delgada y estaban consternadas ante lo que significa una " dieta ". Trataron de comprenderla dentro de un contexto religioso , como una
ángel , porque era la única criatura viva de purificación o algo para fortalecerse espiritualmente . Yo les expliqué que no era así , que las mujeres hacen dieta para atraer a los hombres . Y estas tehuanas -su sociedad es un matriarcadopusieron sus brazos en jarra y exclamaron : "¡¿ Qué ?! ¿ Eso es lo que les hacen a las mujeres en el Norte ?" No sólo estaban desconcertadas , sino furiosas . Ahí fue cuando mi cuerpo volvió a nacer , por la bendición que recibí de ellas . Vivían como yo lo hago ahora : viendo al cuerpo como un vehículo : algunas personas tienen un cuerpo naturalmente pequeño , y ése es su vehículo . Pero algunas mujeres y algunos hombres tienen cuerpos naturalmente grandes , y ése también es su vehículo . Después de aquella primera visita a México , dejé de hacer dieta . Para siempre . Sentí que mi cuerpo estaba hecho para ser grande , y también vi que yo provenía de una antigua línea de mujeres que sentían orgullo por ser como eran . Mujeres de enorme poder .
Niña desplazada del oriente antioqueño . Fotografía cortesía de Jesús Abad Colorado .