Agenda Cultural UdeA - Año 2001 OCTUBRE | Page 21

ISBN 0124-0854
N º 72 Octubre de 2001 que se quiera tanto como aquello que se teme . El clero ha pastoreado estos almácigos de zambos y patizambos y ha creado cuerpos horribles , hipócritas .
Observa don Benjamín , exjesuita , que su maestro de novicios , el reverendo padre Guevara , les ordenó que no se bañaran durante un año , porque así les sería fácil conservar la inmaculada castidad de San Luis Gonzaga . ¿ Qué mujer atrevida podría acercarse a un novicio ? Este sistema del padre Guevara es mucho mejor que el alambre de púas .
En Colombia , desde 1886 no se sabe qué sea alegría fisiológica ; se ignora qué es euritmia , qué es eigeia .
¿ Podría un sedentario de este pobre pueblo andino comprender al yanqui que se lanzó en bola de caucho por el Niágara , o al galo que atravesó el Atlántico en solitaria navecilla de vela ? ¡ Meses y meses en medio y en garras de ese divino monstruo glauco , oscuro , plata , oro ! ¿ Podrán nuestras mujeres comprender a la Lindy americana ? El gran efecto del excursionismo es formar caracteres atrevidos . Que el joven se acostumbre a obrar por la satisfacción del triunfo sobre el obstáculo , por el sentimiento de plenitud de vida y de dominio . El hombre primitivo no comprende sino los actos cuyo fin es cumplir sus necesidades fisiológicas .
Los pueblos acostumbrados al esfuerzo son los grandes . Así , los países estériles están poblados por héroes .
La grandeza de Roma se explica porque ese puñado de Rómulos eran hombres desesperados que tuvieron que robar sus mujeres y sus tierras . Fue el mejor , entre ellos , quien cargó y corrió más briosamente con su joven sabina ; quien mejores músculos y atrevimientos tuvo para la lucha . Así comenzó el estímulo y de ahí nacieron las sugestiones , emociones y moral de los fuertes que produjeron a los Gracos , Pablo Emilio , Mario , César , Nerón … Cuando fueron ricos y nacieron los complejos literarios , cuando nació esa vulgaridad que se llama emociones estéticas , que de todo tienen menos de estéticas , vino la raza sedentaria que fue testigo de las invasiones y triunfos sobre Roma de aquellos bárbaros barbudos , fornidos , orgullosos de sus músculos , de su moral de hombres de presa y de su estética de superhombres .
*********
Cada ciencia que se posea es una ventana más para contemplar el mundo .
Así , el viajero que sea botánico , gozará de la vegetación ; el mineralogista , etc . El hombre de ideas generales , como nosotros , goza de todos los aspectos , pero con la desventaja de la disminución de cada uno de ellos .
El ignorante se aburre en los caminos ; sólo percibe las sensaciones de cansancio y de distancia . Es como un fardo . Su alma está encerrada en la cárcel . Los ojos le sirven sólo para ver la comida , el obstáculo y la hembra ; el oído para oír
ruidos , y el tacto , olfato y gusto , para los fines primordiales .
Sirve para ilustrar esta idea el considerar el yo como un prisionero en casa cerrada y que , mediante labor , fuera abriendo miradores y salidas al mundo .
Íbamos , pues , de cara al oriente , trepando a Las Palmas , por el camino bordeado de eucaliptos , entregados a nuestro amor a la juventud , al aire puro , a la respiración profunda , a la elasticidad muscular y cerebral . Bajaban serranos y serranas , vacas y teme ros , todo oliendo a leche y cespedón . Entramos a despedimos de parientes que veraneaban por allí , gente sedentaria que al vernos de viajeros a pie , nos miraban tristemente como a vesánicos . Ninguno de nuestros conciudadanos ( si es que en Colombia aún tiene uno conciudadanos ) podía comprender nuestros motivos . Para ellos , se camina cuando se va para la oficina , cuando se viene del mercado . No está aún en las posibilidades mentales de nuestro pueblo el comprender los fines interiores . Cuando nos ven hacer gimnasia nos miran con ojos espantados . Una de nuestras criadas huyó de la casa después de vemos hacer los movimientos de Ling , diciendo que no trabajaba en casa de los locos . Encontramos en cada pueblo jovenzuelos montados en mulas orejonas que nos miraban como a seres extraños . En la posadas nos decían : “ Pero , vienen ustedes a pie ?” La señora de la fonda “ La Ciénaga ” nos dijo que si su marido no hubiera estado