Agenda Cultural UdeA - Año 2001 MAYO | Page 26

ISBN 0124-0854
N º 67 Mayo de 2001 una carrera tan hermosa como la suya. Mirella le telefoneó y cuando le dijo quién era, estuvo a punto de desmayarse. Mirella Freni es un paradigma extraordinario para Renée. Admira también a la mezzo-soprano Marilyn Horne, por su voz hermosa, amplia, flexible y coloreada. Para ella, Horne es una auténtica diva. También le encantan las voces del Este, especialmente las rusas, porque son más interesantes, más carnosas. Si su voz es diferente de la de sus compatriotas, se debe, según cree ella, a que sus abuelos matemos eran checos, aunque el apellido F1eming es de origen galés.
La soprano ha cantado todos los grandes papeles de Mozart: La Condesa y Susana de Las Bodas de Fígaro; Donna Anna, Donna Elvira y Zerlina de Don Giovanni; Fiordiligi y Despina de Così fan Tutte, y muchos de otras, incluida La Finta Giardiniera, que cantó en concierto con la Orquesta de París. En realidad su repertorio es vasto: Le encanta Rusalka de Dvorák, no sólo porque tenga tres bonitas arias sino porque se identifica con él: pertenece a su cultura. Cantó Armida de Rossini en Pésaro; Margarita de Fausto de Gounod en París; Eva de Los Maestros Cantores de Wagner en Bayreuth; Alcina de Handel en París; y Desdémona de Otello de Verdi, después del nacimiento de su segundo hijo. Canta mucho Richard Strauss: El Caballero de la Rosa-hizo su primer Mariscala en 1995-, abordará Arabella este año, después hará Dafne, luego la Condesa de Capriccio, inclusive Ariadna de Naxos, más tarde.
Pero, le gustan muchos papeles y le es difícil escoger … Mozart es diferente de Bellini, Rossini de Dvorák, Donizetti de Massenet, Verdi de Strauss … No quiere limitarse. Intenta evitar los papeles demasiado graves, porque desea cantar en el registro agudo y virtuosístico mientras sea joven. Le gustan las obras del repertorio belcantista como aquellas en las que la orquesta desempeña un papel importante como Strauss y Beethoven. Según Fleming, la extensión vocal de las obras que canta es bastante parecida. Sólo diverge el
estilo. La variedad le es tan natural como respirar. Su voz es lo que es, pero con ella quiere hacer todo lo que pueda. Piensa que el sonido es muy distinto entre Alcina, Desdémona, Rusalka o Margarita, pero quiere intentar cantar con el sonido más cálido que sea posible. Quiere entregarse a fondo en todo lo que hace en el plano de la interpretación.
Renée Fleming ha participado en los estrenos The Ghost of Versailles de John Corigliano en el Metropolitan de Nueva York, y Les Liasons Dangereuses de Conrad Susa en San Francisco, así como Susannah de Carlisle Floyd en Chicago, y A Streetcar Named Desire de André Previn en San Francisco. Para ella, codearse con un compositor es algo irremplazable en la carrera de un intérprete. La diva ha tenido una suerte enorme de trabajar con los mejores directores de orquesta: James Levine, Bemard Haitink, Daniel Barenboim, Christoph Eschenbach- con el que se presenta regularmente en recitales- y Sir Georg Solti …, viviendo un verdadero sueño al grabar Rusalka con Sir Charles Mackerras.
El pasado 27 de enero, Fleming cantó en Munich el Requiem de Verdi-en la conmemoración del centenario de la muerte del compositor-. Este año, Fleming realizará varios recitales en Norteamérica y Europa; cantará nuevamente el Requiem de Verdi en Nueva York y Tokio; e interpretará Richard Strauss Los Cuatro Últimos Lieder en Filadelfia, y El Caballero de la Rosa en la gira del Metropolitan por Japón. Cantará Otello en Chicago y Manan de Massenet en París, y desea cantar Louise de Charpentier. Hará, en el 2002, Il Pirata de Bellini en el Metropolitan y Thais de Massenet en Chicago. En el 2003, abrirá la temporada del Metropolitan con La Traviata de Verdi, y Rusalka. Por el momento, en los próximos años, las nuevas generaciones de amantes de la ópera tendremos la oportunidad de contemplar el espectáculo único del ascenso de una verdadera estrella.