ISBN 0124-0854
N º 44 Abril de 1999 éstos especialmente traidores. Y el dinero que tuve, y que me dejó y que no ha vuelto, ni creo que vuelva. Y el garbo y porte de la juventud, que también se fueron y que regresarán menos que el dinero. Y las arrugas que vinieron con su traición cárcava. Pero la Belleza no me traicionó nunca. La belleza, que llevo en mí, y que veo en tantas cosas. Tampoco el Arte: ni el ajeno ni el propio. El gran Señor, gran Damo. Tampoco las palabras me traicionaron. Ellas han estado entera la vida conmigo, y estarán. Fieles, cariciosas, me duran. Las palabras mías han sido mis amantes más duraderas. Con ellas he podido contar, y cuento siempre, para decir de mis cosas o cositas, y para no sentirme nunca solo.
No hay otra cosa qué decir. Se escribe porque escribir da el gozo. Es un placer egoísta, qué duda cabe.
Mario Escobar Velásquez es escritor y Profesor del Taller de Escritores de la Universidad de Antioquia.