ISBN 0124-0854
N º 40 Noviembre de 1998
igualmente en los intermedios de éstos.
Una de las razones más obvias para |
utilizar este acompañamiento musical |
era la de tapar el ruido producido por |
el proyector, otra era darle a la sala un |
aire familiar al |
q |
el público estaba |
acostumbrado. |
|
|
Fotografía tomada de Universitas, Gran enciclopedia del saber: Pag 52
Por: César Augusto Olaya Vargas *
Amedida que el cine ha madurado, lo ha hecho también su música, creativa y tecnológicamente.
La preocupación por la banda sonora no es nada nueva, ya en la época del cine mudo los realizadores procuraban que las imágenes contuvieran la mayor musicalidad posible en sí mismas.
También a la salida de los teatros solía instalarse un grupo musical que tocaba para invitar a la gente a entrar. Luego el conjunto musical se ubicó bajo la pantalla de proyección como las películas consistían en cortos diversos, los músicos tocaban de acuerdo con el carácter del corto presentado e
El número de integrantes de uno de estos grupos musicales era variable, podía ser un pequeño grupo o una gran orquesta; esto dependía del tamaño y el prestigio de la sala. Por esté mismo motivo era que no se componían de partituras originales para películas( salvo contadas excepciones, una de ellas, según el autor Michel Chion, es“ L ´ Assassinat du duc de Guise” en 1908, cuya partitura pasó a formar parte del repertorio del compositor bajo el nombre de“ Opus 128 para cuerda, piano y armonio”), ya que cuando una partitura original que venía junto con la película no podía ser interpretada porque la sala era demasiado pequeña para los músicos requeridos o porque faltaban éstos, entonces la partitura en vez de ser adaptada era reemplazada por alguna otra.
En esta época del cine mudo algunas personas vieron un futuro para la música del cine y se dedicaron a seleccionar fragmentos musicales que podían servir para diversos momentos de la película. Estas partituras llamadas“ música incidental” estaban rotuladas con nombres como“ escena de amor”,“ percusión”,“ tormenta”,“ amenaza”...
Hoy se continúa con esta práctica, con la diferencia de que la música se