Agenda Cultural UdeA - Año 1998 AGOSTO | Page 9

ISBN 0124-0854
N º 37 Agosto de 1998 patrimonio . No un decreto ni una ley .
El Departamento de Bibliotecas se ha constituido en el alma de la Universidad y en uno de sus mayores y más queridos patrimonios . El hermoso edificio de la Biblioteca Central en pleno centro de la Ciudad Universitaria , sobrio , enhiesto , generoso ; sus colecciones : de periódicos ; Antioquia y patrimonio documental ; el acervo bibliográfico de todas sus bibliotecas , cerca de 300.000 ejemplares ; sus actuales tecnologías en todas la áreas ; sus joyas bibliográficas que , en buen número , son un patrimonio aparte ; la puesta en marcha de un Plan de Desarrollo ambicioso y acorde con las exigencias del futuro ; y una planta de empleados que labora a conciencia y con el fervor que el medio pide , responden con eficacia al afecto y al arraigo que innumerables usuarios diariamente demuestran en su uso , tanto investigadores , docentes y estudiantes , como asiduos lectores , apasionados en el disfrute de los textos que la biblioteca ofrece de muchas maneras , y mirando hacia gustos y necesidades diversas .
Ciudades del mundo como París , Londres , Washington , Moscú , México , Madrid y Buenos Aires , entre las más importantes , han hecho de sus bibliotecas patrimonios históricos , culturales y arquitectónicos no sólo de sus países , sino también de la humanidad . Han comprendido ?, gracias a su antigua tradición , que una cultura que defiende su idoneidad y su evolución hacia sociedades más justas e
inteligentes , tiene el alma en sus bibliotecas . El Departamento de Bibliotecas de la Universidad de Antioquia comporta ese anhelo : no sólo el acervo de materiales bibliográficos y de tecnologías al alcance de muchos , sino también la posibilidad de tangibles espacios para la cultura en sus diversas manifestaciones , verdadero solaz del espíritu , vivos alimentos para el pensamiento y la creación .
Nuestras bibliotecas guardan íntima relación con el imaginario colectivo del departamento y del país , y su nombre no es extraño en muchas naciones del mundo .
Todo lo que se haga en pos de este importante patrimonio , se hará en beneficio de toda la comunidad y se hará , ante todo , en favor de su memoria , de la grata posibilidad de contar cada vez con recursos más dignos para la investigación , el estudio , la lectura , el arte , la imaginación , el disfrute del tiempo libre y el ocio .
Escribo para fundar una ciudad / donde las piedras tengan nombres propios / y el sol las llame siempre / al alba , despertándolas . (...), ha dicho Eugenio Montejo ( Venezuela ) en un bello poema llamado “ Una ciudad ”. Y deberíamos decirlo todos , todos los días , denominando con palabras elementales nuestra ciudad , y allí nuestra Universidad , encariñando los muros y espacios de nuestras bibliotecas con el roce , prudente y callado , de los gestos del amor . Es una manera feliz de que el gran patrimonio