ISBN 0124-0854
N º 29 Diciembre de 1997 disponen de pareja y 12.939 personas son discapacitadas.
Cómo vemos la ciudad
Pero aparte de los fríos datos, existe una ciudad que sus habitantes llevan por dentro, una imagen que queda del diario vivir, la ciudad que se quiere, se odia o a la que se es indiferente. La consulta ciudadana, llevada a cabo para la elaboración del plan, permitió establecer un balance perspectivo de las fortalezas y debilidades de la ciudad metropolitana. Estos fueron algunos conceptos que quedaron claros.
Puntos fuertes
Una buena autoimagen de la ciudad y de sus gentes. El tren metropolitano se identifica como el gran acontecimiento urbano de fin de siglo. El área metropolitana cuenta con la más eficiente prestación de servicios básicos de consumo individual en el país. Gran vitalidad de la ciudad y de sus organizaciones sociales. Estructura urbana de calidad. Avances notables en infraestructura vial. Una buena plataforma interna para los negocios. Sectores industriales en franco proceso de renovación productiva. Cultura de trabajo de sus gentes. Avance en algunos servicios modernos, particularmente en el campo de los servicios médicos y financieros. Avances en cobertura e infraestructura educativa. Infraestructura cultural aceptable y crecimiento de núcleos culturales periféricos. Riqueza del ecosistema, el clima y el paisaje.
Medellín es una marca internacionalmente reconocida y admirada en el país como una ciudad dinámica y pujante. Integración formal del área metropolitana.
Puntos débiles
La tensión entre los valores tradicionales y modernos se percibe, con frecuencia, como antagónica. La ciudad aún no logra estructurar un sistema integrado de transporte. Persisten grandes dificultades de seguridad y convivencia. Segregación social y segmentación espacial. Carencia de espacios públicos para el disfrute de la ciudad. Problemas de accesibilidad y precaria conexión con los puertos marítimos. Industria concentrada en sectores vulnerables a la competencia y el contrabando y con débil integración de sus cadenas productivas. Altos índices de desempleo y deterioro de los ingresos familiares. Debilidad en los servicios de apoyo a la producción y en la incorporación de nuevas tecnologías. Persistencia en los problemas de calidad de la educación. Bajos índices de utilización de la infraestructura cultural y alta concentración de la oferta existente. Persistencia de riesgos en el deterioro ambiental. Medellín es una marca que aún se asocia en el exterior al narcotráfico y la violencia. Dificultades para una articulación real de planes, políticas y acciones en el área metropolitana. Así nos queda el boceto de la ciudad actual con la que se conforma la idea de otra mejor para el futuro.