Ad gentes revista nov_dic | Page 49

El reconocido director Hirokazu Koreeda vuelve al tema de la familia, siempre pre- sente en su filmografía, de la que en México solo hemos visto De tal padre, tal hijo (en 2014). Aun en una sociedad tan tradicio- nal como la nipona, Koreeda sabe que la familia actual ya no es la misma, y aquí lo hace ver con exquisita naturalidad en un hogar llevado por tres jóvenes hermanas que viven de su trabajo y comparten todo lo que son y tienen. Sachi, la mayor y más seria, es enfermera y trabaja en cuidados intensivos y de enfermos terminales; Yo- shimo es agente de seguros en un banco y no está tan contenta en sus tareas; Chika, la más joven, es empleada y presume de ser buena bebedora, y Suzu sigue estudian- do con gran dedicación y responsabilidad. Cuatro personalidades muy diferentes que van armando una vida cotidiana en común con la comunicación transparente de sus sentimientos y opiniones, la resolución de sus diferencias y conflictos, la ayuda mu- tua, el cuidado cariñoso por encontrar y elegir lo mejor para cada una. Una visión muy contrastante para la sociedad actual tan centrada en el individualismo, la indiferencia o la violencia, mientras la película apuesta por la construcción de la vida en el interés por los demás, en la comunicación sincera y en el valor de los pequeños gestos cotidianos. La historia reposa de forma muy agradable y bella en esos gestos, sobre todo los de la mesa compartida. Las cuatro chicas disfrutan al preparar los alimentos y comer juntas, o en las comidas acompañadas de amigos o compa- ñeros, o en la fonda donde una cocinera es fe- liz sirviendo a sus clientes. El licor de ciruelas que preparan las hermanas con los frutos del jardín y la receta de la abuela se convierte en la comunión con el tronco familiar y con lo mejor de las herencias. Sabías que... La película está basada en el cómic japonés (manga) Umimachi Diary de Akimi Yoshida. AD GENTES NOVIEMBRE · DICIEMBRE 2017 47