MISIÓN Y PERSPECTIVA
ha entrado en el misterio del ser humano
y ha entrado en su corazón individual y
colectivo. Que Dios se ha unido en cier-
to modo a cada ser humano; que trabaja,
piensa, actúa y ama como un ser humano
y que no tiene otro camino que las vías
humanas de crecimiento, desarrollo y sal-
vación.
Un respeto sagrado a la persona
Ciertamente el ser humano revelado en
el Misterio de la Encarnación supera al
natural, pero lo incluye. El misionero es
consciente de esta realidad, por eso su
acercamiento a los pueblos y a sus respec-
Cuando un ser humano no puede
vivir con dignidad, para nosotros
cristianos, no es solamente
un problema socio-económico-
político, sino un problema de fe.
tivas culturas está marcado por un respeto
sagrado a la persona, es el acercamiento
descalzo que Dios pide a Moisés antes de
pisar el suelo donde se encuentra Dios. La
comprensión de este misterio hace que
todo nuestro trabajo de evangelización
tenga como centro de todo su discurso
el valor de la persona y la persona como
valor. En este sentido, la misión toma un
tinte fundamental de promoción humana,
porque el misionero comprende y acepta
que no se trata de promover y difundir
una religión sino dar a conocer a una per-
sona: Jesucristo; que ama al ser humano y
quiere que tenga vida en abundancia, por
eso da la vida por él.
La Encarnación: sentirse parte
del Cuerpo de Cristo
Desde la perspectiva de la Encarnación
podríamos decir que el cristianismo no es
una religión, sino hombres y mujeres que
se sienten parte del cuerpo de una perso-
na que se llama Jesús y, el seguimiento
de esta persona exige perder el miedo a
ser verdaderamente humanos, Dios no ha
tenido nunca este miedo, así nos dice san
Pablo en su carta a los Filipenses: que Dios
se hizo verdaderamente uno de nosotros,
en todo semejante a nosotros, menos en el
pecado (Flp 2, 6-11) . Esta conciencia hace que
el misionero encamine todos sus esfuerzos
a ayudar a que todo ser humano se perciba
como sujeto, fundamento y fin de la vida
social en todas sus expresiones; un trabajo
evangelizador que apunta a la recuperación
de la imagen original del ser humano: «ima-
gen y semejanza de Dios, inteligente y libre,
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AD GENTES
NOVIEMBRE · DICIEMBRE 2017