BIOÉTICA
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costo-beneficio
Como muchos otros estudios de la bioética, la reflexión sobre la producción y el uso de GMOs se resuelve en función de la relación beneficencia-no maleficencia.
Poco a poco los GMOs son percibidos de mejor manera en la mayor parte del mundo, y muy probablemente serán la solución a problemáticas que la humanidad nunca antes había enfrentado.
las seleccionan sin saber que se trataba de propiedad intelectual de alguien más. Estas situaciones deben ser tratadas con cautela, bajo una sombrilla de justicia para ambas partes. Además, si los vegetales pueden ser modificados genéticamente y ser patentados, ¿estamos permitidos a modificar genéticamente a humanos?
Al ser muchos GMOs más resistentes a las condiciones ambientales y a plagas, si se exparcieran a espacios silvestres podrían aventajar a otras especies y modificar la dinámica ecológica de los ecosistemas; las cadenas tróficas podrían alterarse y se perdería diversidad de especies y genética.
Todos estos factores parecieran indicar que producir y utilizar GMOs es una dinámica de
alto riesgo. Sin embargo, debemos recordar que durante toda la historia hemos modificado a otros organismos para nuestro beneficio. Hemos seleccionado artificialmente las mejores variedades de vegetales y hemos creado tiernos cachorros a partir de lobos silvestres. Lo que sucede es que ahora tenemos las herramientas para hacerlo de una manera mucho más directa. No hay innovación ni tecnología mala por sí misma, sino es el uso que se le da lo que determina su viabilidad. A pesar de todos los dilemas éticos que están asociados a los GMOs, pareciera ser que ante el aumento de la población humana y los retos ambientales venideros debido al cambio climático, nos será inminente recurrir a ellos. Es necesario que se creen leyes estrictas que delimiten los alcances de esta tecnología, siempre en función de los principios de bioética, y que prevean los posibles riesgos ecológicos, sociales y económicos que pudieran surgir.