No había templo, pero hacían cultos en su tante que tienen cada año es una vigilia para
hogar y aunque invitaban a sus amigos y vecinos que Dios bendiga la cosecha del piñón, alimento
siempre estaban solos para adorar a Dios. Nos vital para ellos. La condición de vida de Laura y
hablaron del pasado de la obra y sus sueños pa- su esposo Gonzalo era de mucha pobreza, vi-
ra el futuro. Ella con lágrimas en su rostro expre- vían en una casa muy pequeña, no tenían agua
só: “con mis ojos espirituales puedo ver que un ni luz, sin embargo, ella gozaba de una fe incon-
día, no muy lejano, existirá un templo en este lu- movible, con un corazón agradecido por las
gar”. Después de compartir con estos ancianos bendiciones recibidas. Cuando me despedí de
oramos por ellos con la convicción que como Laura, y lo recuerdo, no pude dejar de pensar y
obra bautista algo debíamos hacer en Cauque- orar por aquellas hermanas y hermanos que vi-
nes. Meses después de nuestra visita, la esposa ven la fe en Cristo a lo largo de nuestro país con
de nuestro hermano falleció. Hoy existen dos pasión, que sirven con alegría en la obra del Se-
congregaciones en la ciudad, la primera un tra- ñor a pesar de sus limitaciones económicas,
bajo directo de la iglesia de Quirihue con una geográficas o de formación académica.
iglesia plantada en Cauquenes Estación y la se-
gunda congregación un proyecto misionero don-
¿Qué episodio fue lo más difícil para usted?
de sirve el pastor Pablo Parra. El Señor ha sido
A lo largo de estos ocho años hubo muchos
fiel.
episodios difíciles, definir uno es muy complejo,
algunos fueron con uniones nacionales, otros
con asociaciones y otros con personas de mane-
ra particular. Durante los ocho años nos vimos
enfrentados a distintas situaciones complejas. La
silla de la presidencia hay que asumirla con hu-
mildad y espíritu de servicio donde los egos y los
sentimientos de poder deben ser desterrados.
Asumimos esta tarea para honrar al Señor y ser-
vir a las iglesias. Los episodios difíciles y amar-
gos se sobrellevan cuando el equipo con el que
se trabaja logra conectarse y ser leales uno al
otro.
Junto al liderazgo bautista de Magallanes.
La otra experiencia que guardo con mucho
cariño en mi corazón sucedió junto al pastor
Mario Lincoleo, hermana Elizabeth y Elena
cuando nos dirigimos a visitar a la encargada de
una pequeña misión formada por hermanos (as)
Pehuenches ubicada en plena cordillera de la IX
región, cerca del límite de Argentina. Allí conocí
a Laura, una mujer prácticamente sin estudios,
con mucho amor al Señor de la obra y amplio
sentido de responsabilidad por el cargo que
Dios le había encomendado. En medio de una
comunidad machista, era respetada y los her-
manos se sujetaban a su liderazgo. Allí toma-
mos conocimiento que la actividad más impor-
¿Cuál es su análisis de la situación de la obra
hace 8 años y cómo la ve hoy?
Siempre la visión o análisis de la obra es in-
completa, porque esta va a estar determinada en
el lugar donde te encuentres en tu conexión con
la obra. A lo largo de mis años de ministerio, con
pastorado en el norte de Chile o en el sur, siem-
pre he sido parte de liderazgos regionales o na-
cionales y los dos últimos años de la presidencia
de hermana Raquel Contreras colaboré como
vocal de Ubach. Sin embargo, como presidente
tienes una mirada distinta. Hay cosas que anhe-
las realizar, pero a veces es tan difícil de concre-
tar por los reglamentos, estatutos o simplemente
porque en esos primeros años no había recursos
económicos.