3er Reencuentro Generacional FCC REVISTA DE REENCUENTRO | Page 26

amigos de la familia. los que pasamos juntos, muchas añoranzas, Si alguien se acercaba a darme el pésa- pláticas, y ocurrencias; las escribo más que para me y me preguntaba ¿Cómo estás? decía que decirte cosas que no te haya podido decir, para bien, platicábamos un poco y después les pre- dejar constancia de tu existencia más allá del sentaba con tu familia para que dieran el pésa- docente. me. Que sepan el maravilloso hijo que fuiste, Y así fue hasta que, en un abrazo, nues- preocupado y apoyando a tus padres hasta el tra querida Ema Ojeda me dice: “mis cuatro fan- último momento; el increíble hermano, siempre tásticos”. Entonces se me saltaron las lágrimas, amándolos, y apoyándolos; el tío consentidor y no lo pude evitar, fue donde comprendí tu au- amoroso con tus sobrinos; el amigo fiel y dedi- sencia. Ya nunca más estaríamos juntos Eva, cado; pero sobre todo un maravilloso ser hu- Brenda, tu y yo. El equipo inseparable desde mano, firme en sus convicciones, recto y hones- que éramos estudiantes en la Facultad de Co- to. municación. Ya no seguiríamos tomándonos Gracias por todo, por servirme de ejemplo nuestra foto. Fue ahí donde comprendí lo avasa- para tantas cosas, por todo lo que te ocupaste y llante de tu partida. preocupaste por mí, por todo lo que me diste, Hoy si me preguntan si estoy bien, puedo por todas las veces que me escuchaste, que me decir asertivamente, como tú lo hiciste toda la apoyaste, que me aconsejaste. Por todas esas vida: no, no estoy bien, estoy muy jodido por có- veces que reímos juntos, que lloramos juntos, mo pasó todo, por cómo de repente una perso- por todo lo que me enseñaste… aunque tu últi- na joven, querida, preparada, inteligente, pero ma lección sea la más dolorosa de aprender: sobre todo, un excelente ser humano, se fue así que mi mundo se va despoblando y se va que- de repente... pero también puedo decir que tu dando cada vez más vacío. presencia persiste a través de todos los que te Me queda el consuelo de haber visto des- quisimos, de tu familia, de tus amigos, de tus tellos de eternidad cuando conversábamos, alumnos, de tus libros y del legado que dejas, cuando hablamos de tus viajes, de tu proyecto un legado de amor a todos ellos y a tu profesión, de branding personal, todos esos planes que te a la docencia y a la investigación. disponías a cumplir como si te aguardaran mil Quiero que sepas algo que seguramente años de existencia. Porque la inmortalidad eras te desagradaría oír: estos últimos días han sido tú cuando estabas vivo, y sé que tu luz brillará de los peores de mi vida, equiparables a la pér- por mucho tiempo en la memoria de todos quie- dida de mi madre, es ahí cuando comprendí que nes te queremos y conocimos. Un fuerte abrazo no perdí un amigo sino a un hermano, por eso a donde quiera que estés mi hermano. Hasta me ha costado tanto escribir estas líneas. Están que volvamos a encontrarnos. escritas entre lágrimas, pero también entre ri- sas, porque fueron muchos momentos increíbles