Edwards would have to give best to Bayliss and Ducati in 2001 , but the 2002 Championship win was a miracle for Edwards .
He was being gently toasted on both sides by Bayliss for half the season but the pressure of racing at home in Laguna Seca , on a stars ’ n ’ stripes colour bomb of a VTR too , saw him start to win and turn his season around .
Europe , always a fertile place for American glamour and culture to seed , eventually took to Edwards so much that even the generally partisan Imola crowd in 2002 saluted him warmly , and genuinely , when he beat Bayliss and Ducati .
Edwards , after some tough career moments , had become not only a Champion , then a double Champion and in that moment an all-time WorldSBK legend .
Half Australian , Edwards was still as Texan as it is possible to be without having gravel from The Alamo in his pockets at all times . He never lost his wild-west cowboy image , and even cultivated it at times . Not always to his advantage , but it was usually an unmistakeable asset .
The next logical step was MotoGP™ , but despite his double Championship win for the ‘ Big H ’ brand , Honda didn ’ t take him . Aprilia put him on their esoteric ‘ Cube ’ but it didn ’ t work out . A further 11 seasons in MotoGP™ racing meant he actually spent more of his career over there than in WorldSBK , but no matter , he was still lauded as one of the best ever WorldSBK riders .
He is also the man who gave Honda two World Championships in three full attempts with their very own ‘ Ducati-beater ’ veetwin . That in itself was an all-time achievement in WorldSBK terms .
Five other American riders have been WorldSBK champion , but Colin Edwards never stopped being a Lone Star Superstar in WorldSBK ’ s collective memory .
En 2001 Edwards no pudo doblegar a Bayliss y su Ducati , pero la victoria en el Campeonato de 2002 resultó un milagro para él . Presionado constantemente por Bayliss durante la mitad de aquel año , la presión psicológica de correr en casa , en Laguna Seca , sobre una VTR decorada con las barras y estrella de la bandera norteamericana le permitió vencer y darle la vuelta a su temporada .
Siempre muy sensible al magnetismo del glamour y la cultura estadounidenses , Europa acabó por admirar tanto a Edwards que incluso el público de Imola , generalmente muy partidista , le tributó un cálido reconocimiento en 2002 cuando venció a Bayliss y su Ducati . Después de superar algunos momentos duros durante su carrera , se proclamaba campeón por segunda vez convirtiéndose en una leyenda de todos los tiempos del WorldSBK .
A pesar de ser medio australiano , Edwards seguía siendo tejano hasta las cachas aunque no llevara tierra de El Álamo en sus bolsillos todo el rato . Nunca perdió su imagen de vaquero del lejano oeste , y a veces incluso la cultivó . No siempre en su beneficio , pero generalmente como uno de sus rasgos inconfundibles .
El siguiente paso lógico debía ser MotoGP™ , pero pese a su doble título de WorldSBK la marca del ala dorada decidió no ficharle . Aprilia lo subió a su esotérica “ Cube ”, pero no funcionó . Durante 11 temporadas Edwards estuvo compitiendo en MotoGP™ -mucho más tiempo que en WorldSBK- pero siempre fue considerado como uno de los mejores pilotos de WorldSBK de todos los tiempos .
También es el hombre que le dio a Honda dos Campeonatos del Mundo en tres temporadas con su propia V-twin “ mata Ducatis ”, todo un logro histórico en el ámbito del WorldSBK . Otros cinco pilotos estadounidenses han sido campeones de WorldSBK , pero Colin Edwards nunca dejará de ser la gran superstrella tejana en la memoria colectiva de esta categoría .
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