Última hora
Nosotros, como ya es costumbre, cuando llega una nueva tendencia como es el romancero viejo, llamamos a nuestro tarotista profesional para que nos diga si va a ser duradera en el tiempo y qué va ser de ella. Aquí les dejamos el veredicto de Rappel:
« Preveo que para dentro de un siglo estos Romances se recogerán por escrito y se recopilarán en los llamados cancioneros o romanceros. También preveo que entre el siglo XVI y el XVIII nombrados autores cuyos nombres no voy a decir para no alterar los futuros acontecimientos modificarán estos romanceros creando el Romancero nuevo o artístico como composiciones cultas »
Bueno después de todo este discurso que les hemos contado sobre el romancero viejo, se estarán preguntando qué narices es eso...
Pues bien hemos pensado que la mejor forma de contaroslo es enseñandoos sus características mediante un romance recién escito durante estas semanas anonimamente, la verdad es que es un joya, el que lo ha escrito podría darse a conocer...
Ahí va:
— ¡Abenámar, Abenámar,
moro de la morería,
el día que tú naciste
grandes señales había!
Estaba la mar en calma,
la luna estaba crecida,
moro que en tal signo nace
no debe decir mentira.