ZOUK MAGAZINE (Versión en Español) NÚMERO 4 | Page 211

211 los que gustamos de comer en condiciones no somos de fácil amedrentar e iniciamos el viaje hacia lo que ahora es la Ciutat de la Justicia, para hacerle ídem a nuestro estómago. Queda cerca aunque no se lo crean, pero ante todo pensar en lo que espera a la llegada rearma nuestras convicciones. La Granja es un bar de barrio. Y de barrio obrero, trabajador. De los de siempre, de toda la vida, sin sofisticaciones ni decoraciones glamourosas que se pagan en la cuenta. Aquí se paga lo que se come, que suele ser mucho y bueno porque su compromiso es estar en el top barcelonés de locales semisecretos donde encontrar platos inesperados. ¿Pero de qué hablamos realmente? Pues hablamos de encontrar en un bar de apariencia cualquiera un menú a base de platos como royale de bogavante con vichysoisse de espárragos, merluza en jugo de berberechos y puré de perejil, canelones con bechamel de ceps, papada con cigala frita y berza con trufa, carrilleras de ternera estofada al vermut con trompetas de la muerte y un largo etcétera orgasmático. Evidentemente no es la carta