ZOUK MAGAZINE (Versión en Español) NÚMERO 2 | Page 15
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Avenida de Vizcaya, 3
26200 Haro
Teléfono 941 31 02 44
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www.lopezheredia.com
construcción, como una antigua catedral.
Un proyecto no sólo de bodega, sino también de un vino y de una familia, que tienen la férrea voluntad de perpetuarse en
el tiempo, ella y su manera de entender el
vino, y en la que cada generación quiere dejar su impronta, pero sin traicionar lo que
siempre han sido los vinos López de Heredia. Una casa que es un ejemplo viviente, y
en perfecto estado de salud, de lo que es un
típica bodega riojana. Un laberinto, el txori-toki, con paredes de sillería asentado sobre piedra arenisca horadada, en formación
de calados de hasta 200 metros de largo y
naves subterráneas a más de 10 metros de
profundidad. Unas auténticas catacumbas.
De todas formas, en este templo decimonónico también hay lugar para la arquitectura más contemporánea. En 1910, Rafael
López de Heredia encargó a algunos artesanos de Haro la construcción de un stand
para la Exposición Universal de Bruselas de
aquel año, en la que los vinos de Viña Tondonia consiguieron el Grand Prix. Los herederos siempre quisieron reconstruir esa joya
modernista -la bodega contiene otras, como
las antiguas oficinas y una estancia que se
usa para las catas- y por eso iban guardando los pedazos que aparecían desperdigados
por los rincones. Encargaron la restauración
a Blanca Ameztoy Fernández-Montes, que
se dedicó a ello durante más de un año. Una
vez concluida con éxito, surgió el problema.
¿Dónde colocar el stand restaurado? No podía estar a la intemperie del clima riojano.
Así que pensaron en crear una estructura
exterior que lo recubriera y protegiera.
Le encargaron el proyecto a la arquitecta
iraquí, afincada en Londres, Zaha Hadid. De
la colaboración y entendimiento entre la familia López de Heredia y la arquitecta salió
el proyecto de un nuevo edificio, que hoy
sirve de tienda y espacio lúdico y expositivo, y que se conoce como “la frasca”, aunque parece más bien un decantador. En este
espacio se ubicó, definitivamente, el stand
del bisabuelo López de Heredia.