ZINE 1 Revista Apuntes | 页面 8

Ciencias Sociales 08 responde a una renuncia sobre sí, sino que más bien implica el advenimiento de un sí mismo. Pero este conocimiento de sí se constituye como un anexo funcional al poder y no solo al que es ejercido sobre sí mismo, sino que a la gobernabilidad en su sentido más extendido. El autor en su genealogía nos expone como en el devenir de la moralidad moderna ha imperado el imperativo “conócete a ti mismo” el cual consiste en el rechazo a lo que es el sujeto (p. 54). En base a lo anterior se puede entender que el sujeto se pierde en cuanto que el conocimiento de sí mismo, la tecnología del yo insigne de la modernidad, está a servicio de las tecnologías del poder que al ser totalizantes rechazan al sujeto. El poder produce tecnologías funcionales en formas de yoes que a su vez son racionalidades situadas que surgen de prácticas y condiciones de producción materiales del poder. A este hecho será al cual Foucault hará referencia al plantear que el poder no es estático, sino que fluye a través del sujeto. Otra forma de entender cómo es que el conocimiento de sí se constituye como fundamento para el poder totalizante es desde la inversión jerárquica de las tecnologías del yo propuesta por el autor. Dentro de la genealogía del yo desarrollada a lo largo del texto se reconoce un primer momento bajo el principio “cuídate a ti mismo” que luego es superado por el de “conócete a ti mismo”. Sobre el primero de estos principios el autor dice que “puesto que se trata de distintas formas de cuidado, se trata de distintas formas del yo” (pág. 53). En este principio es posible reconocer un poder que es ejercido por sí para sí, el yo se constituye en cuanto es que es actividad y práctica ejercida sobre sí mismo. En este caso el poder que se ejerce como práctica sí produce sujeto, cuestión que queda de lado al invertir la jerarquía de los principios y quedar con total predominancia el “conócete a ti mismo”. Así el sujeto no queda solo rechazado, como propone Foucault, sino que queda operacionalizado y objetivatizado por el poder. La forma en que el conocimiento de sí se ha constituido como fundamento del poder, referido a la dominación no estática que actúa sobre el sujeto objetivatizándolo, queda mostrado más patentemente en dos situaciones históricas claves para entender como se ha constituido la genealogía del yo e inherente a ello la del poder; el pastoreado y la policía del estado moderno. Ambas cumplen con una estructura de funcionamiento similar en las cuales la base que las figuras de poder, pastor y policía, lo controlan todo. La razón de estado se materializa en la policía la cual vela por la felicidad, moral y vida de los sujetos; es decir vela sobre los sujetos, los atraviesa y el conocimiento de sí mismo es una policía de sí mismo. Entendiendo así el conocimiento de sí mismo y las tecnologías del yo como fundamento para el poder individualizador y totalizador propio de los