Winflag11 (Junio 2013) | Page 5

Los directivos de la FA inglesa reaccionaron doblemente mortificados por esa frase . El partido había visto al excelente equipo comandado por Ferenc Puskás humillando a Inglaterra , ahora los funcionarios escuchaban que un inglés , Hogan , había plantado las semillas no sólo de la revolución húngara de fútbol pero que esta se había extendido por toda Europa Central . Apenas sorprende que muchos años más tarde el entonces capitán de Inglaterra , Billy Wright , declarase que hubo gente pensaba que Jimmy Hogan era un traidor a la patria . De hecho Hogan era un patriota y admirador de la forma tradicional en que el fútbol inglés se había jugado antes de que su trabajo y el de su amigo austríaco Hugo Meisl , mostrara sus defectos fundamentales . Sus métodos de entrenamiento se basaban en practicar el dominio del balón una faceta que ya en 1953 y hasta el día de hoy es muy deficiente en los jugadores ingleses . A lo largo de su larga carrera nunca le pidió a nadie hacer nada que él mismo no pudiese acometer pero sus normas profesionales y éticas ( adicionalmente era un devoto católico apostólico romano ) eran tan exigentes que cuando regresó a Inglaterra para dirigir al Aston Villa y Fulham en la década de 1930 y ser el entrenador del Celtic , los jugadores de alto rendimiento de esa era se sintieron embargados por un sentimiento de inferioridad y argumentaron que no necesitaban de sus enseñanzas . Curiosamente y mucho tiempo antes de aquel día en Wembley , mientras Hogan formaba parte del Bolton de Inglaterra ese equipo se enfrentó al FC Dordrecht de Holanda y le venció fácilmente , Hogan prometió volver y enseñarle a esos muchachos a jugar correctamente . Así y a sus 30 años de edad efectivamente retorna a tierras holandesas para convertirse en el entrenador más joven de la historia del fútbol británico en estar a cargo de un equipo en el continente . Los profesionales le dijeron que el mantenerse en forma física era un asunto personal y que no esperaban que el entrenador les guiase en esas tareas , idea opuesta al manejo de sesiones de entrenamiento típicamente británico en que la resistencia física se trabajaba para vencer al oponente en un partido y donde poco se trabajaba con el balón durante la semana para que así los jugadores estuviesen ansiosos por tenerle en el día del partido . Pues bien , los hombres que entrenó en el continente exigían y esperaban que se les indicase cómo mejorar sus habilidades con el balón y la forma de utilizarlas para de esa manera jugar como equipo con mayor eficacia . En la práctica Hogan estaba enseñando los rudimentos del fútbol total a generaciones de futbolistas décadas antes que Johan Cruyff y Franz Beckenbauer se enfrentaran una tarde de verano de 1974 en Alemania .