el área por Jim Leighton. Juanito marcó de penalti. Real Madrid parecía contentarse con mantener los Dons a raya y no fue hasta la segunda mitad del encuentro cuando Aberdeen recuperó la iniciativa.
Las pesadas condiciones del terreno fueron minando las energías de ambos equipos pero las sucesivas olas de ataque del Aberdeen podrían haber sido mejor recompensadas. Una volea de Gordon Strachan fue salvada por las piernas del portero. Luego Agustín contuvo un cabezazo del siempre peligroso Black y un remate de de Neale Cooper pasaba muy cerca. Parecía que en el Madrid estaban contentos con enviar la eliminatoria a la prórroga y de ser necesario a la definición por penaltis. En el equipo escocés John Hewitt había reemplazado a Black casi al acabarse el periodo reglamentario y en el minuto doce de los 30 de alargue Peter Weir habilitó a Mark McGhee por la izquierda. El centro perfecto de McGhee no fue cortado por el portero del Madrid y le cayó a John Hewitt quien lo envío hacia la red. La esperada réplica del Madrid sólo se materializó en los últimos minutos del partido. Una falta servida dos veces por Salguero pasó rozando el poste y con ello todo había terminado. En medio de escenas de alegría desenfrenada los Dons lo habían hecho. En la fría luz de ese día en Suecia Aberdeen había conseguido lo que sólo el Celtic y Rangers en Escocia habían logrado antes que ellos. Para un equipo provincial de Escocia el haber ganado ese trofeo era aún más notable. Los Dons regresaron a su ciudad al día siguiente y fueron recibidos como héroes.
Por: @ RaulVB