ACTIVIDAD 1
Identifica en los siguientes relatos:
- el hecho que se narra;
- la enseñanza que se deriva de ese hecho (puede estar explícita en la moraleja, o implícita en el
relato).
TEXTO 1
EL PERRO AVARICIOSO
Un perro, llevando a nado por el río un pedazo de carne, vio reflejada su propia imagen en el
espejo de las aguas, y pensando que era algún otro perro, que llevaba otra presa, quiso quitársela.
Pero, engañado así por su propia codicia, soltó la que tenía en la boca, y vino a perder esto y
aquello otro con que ideó regalarse.
FEDRO , Fábulas (Roma, S. I d. C.)
TEXTO 2
LOS RATONES QUE COMÍAN HIERRO
Dijo Calila:
-Dicen que en una tierra había un mercader pobre, y se quiso marchar; y tenía cien
quintales de hierro, y se los encomendó a un hombre que conocía. Y se fue a buscar lo que
necesitaba y, cuando volvió, lo reclamó. Y aquel hombre lo había vendido y había gastado el
dinero, y le dijo:
-Lo tenía en un rincón de mi casa y se lo comieron los ratones.
Dijo el mercader:
-Ya oí decir muchas veces que no hay nada que más roa el hierro que ellos, y yo no me
preocuparía, pues te libraste bien de ellos.
Y el otro se alegró de lo que le oyó decir, y le dijo:
-Come y bebe hoy conmigo.
Y le prometió que volvería, y se marchó de allí y planeó cómo cogerle un niño pequeño que
tenía; y lo llevó a su casa, y lo escondió. Después volvió a él, y el otro le preguntó:
-¿Viste a mi hijo?
Le dijo:
-Cuando estuve cerca de allí, vi un azor que arrebató a un niño, quizá era tu hijo.
Y el otro dio grandes voces y se lamentó, y dijo:
-¿Viste nunca algo igual? ¿Un azor arrebatar a un niño?
Dijo el mercader:
-En la tierra donde los ratones comen cien quintales de hierro no es extraño que sus azores
arrebaten a los niños.
Y entonces dijo el buen hombre:
-Yo comí tu hierro, y veneno comí y metí en mi vientre.
Dijo, el mercader:
-Pues yo robé tu hijo.
Y le dijo el hombre:
-Pues dame mi hijo y yo te daré lo que me dejaste en préstamo.
Y así fue hecho.
ANÓNIMO, Calila y Dimna (S. XIII)